La patronal europea alerta sobre la corrupción en los países del Este
Así lo expresó ayer Georges Jacobs, presidente de la Unión Europea de Confederaciones Empresariales (Unice), al comienzo de la cumbre europea empresarial que tiene lugar en Bruselas.
El líder de la confederación patronal europea instó a los países del Este a que pongan en marcha todos los mecanismos necesarios para cumplir los criterios de adhesión antes de finales de 2002. Jacobs aseguró que hay un gran interés en la ampliación por parte de las empresas, pero advirtió de que 'no a cualquier precio'.
El objetivo es que los 10 países que tienen prevista su adhesión a la Unión Europea (Estonia, Letonia, Lituania, Polonia, República Checa, Hungría, Eslovenia, Eslovaquia, Malta y Chipre) hayan superado las carencias administrativas antes de esta fecha, requisito imprescindible para maximizar el potencial de negocio, indica la patronal europea.
A estas dificultades se añaden, según las mismas fuentes, las elevadas tasas de desempleo, la excesiva burocracia de sus administraciones y la ausencia de un buen sistema educativo.
El comisario europeo Günter Verheugen, responsable de la ampliación, advierte que los futuros Estados miembros deberán hacer un último esfuerzo para incorporar toda la normativa comunitaria a su sistema legal. Verheugen recordó que en ninguna otra ampliación los candidatos partían desde una realidad jurídica tan alejada de la comunitaria.
Ya hay progresos
La patronal europea considera que los países candidatos han llevado a cabo progresos sustanciales desde el año pasado, lo que les ha permitido lograr una situación macroeconómica estable y unas tasas de crecimiento elevadas. Además, poseen una mano de obra cualificada y barata, resultando, ya en la actualidad, atractivos a la inversión extranjera directa, tanto comunitaria como de terceros países. La Comisión Europea prevé, para los países candidatos más avanzados, un crecimiento medio del PIB del 4,8% anual para el periodo 2000-2009. La consultora McKinsey calcula que la renta per cápita de la República Checa tardará sólo 15 años en alcanzar el nivel europeo. 'Sin embargo, no hay que bajar la guardia', advierte Jacobs.
El Consejo Europeo de Sevilla (21 y 22 de junio) abordará los avances de los diferentes candidatos y dedicará especial atención a los capítulos de negociación más conflictivos (política agrícola y regional).
Bruselas presentará un informe sobre la evolución de cada candidato, entre los que Rumania y Bulgaria siguen siendo los más rezagados.