Bastida declara que Uriarte conocía la existencia de las cuentas opacas
El juez Baltasar Garzón tomó declaración además al ex consejero Juan Entrecanales, quien fue miembro de la comisión de control del BBV en 1994. Según Bastida, los fondos opacos que el banco tenía en los paraísos fiscales se gestionaron muy bien y permitieron que la entidad obtuviese importantes rendimientos, explicaron fuentes jurídicas.
A lo largo de su largo testimonio, de 'carácter eminentemente técnico y muy detallado', según las fuentes, el ex directivo afirmó que además del ex presidente del BBVA Emilio Ybarra, también estaba al corriente de las cuentas secretas el ex consejero delegado Pedro Luis Uriarte. Según Bastida, Uriarte, en 1995, conocía la existencia de Amelan, y estuvo de acuerdo con la decisión de cubrir una pérdida de 47,6 millones de dólares detectada en la auditoría interna del balance correspondiente a 1994, con dinero proveniente de esa fundación del banco, que no figuraba en los estados consolidados de la entidad.
Al referirse a las plusvalías que produjeron las acciones de Argentaria, Bastida mencionó también al ex consejero Gervasio Collar y al ex vicepresidente José Domingo Ampuero, aunque las fuentes no pudieron precisar las afirmaciones o alusiones concretas de Bastida.
Garzón, que no intervino con preguntas a lo largo de la declaración de Bastida, se vio obligado a interrumpir durante dos horas el interrogatorio para determinar la situación judicial del director de auditoría interna de la Caja Laboral Popular, Ignacio Mallagaray Cortázar, detenido por presunta colaboración con el entramado financiero de ETA.
Tras el receso, el testigo describió de qué manera Ybarra le ordenó transformar la estructura de sociedades de Liechtenstein, creadas por Pedro Toledo cuando estaba al frente del Banco Vizcaya (BV), por una fundación en Jersey y que tuviera como beneficiario al BBV. Ratificando extremos ya conocidos, Bastida dijo que los abogados suizos Peter Goop y Hans Wille fueron los responsables de la creación de Candiac Foundation, que a partir de 1995 pasó a llamarse Amelan. Los cuatro responsables con firma de esta fundación fueron los ex consejeros Rodolfo Molinuevo, José Luis Segimón y José Antonio Sáenz Azcúnaga, además del propio Bastida.
Haciendo gala de su conocimiento profundo de todo el entramado secreto creado por el BBV, Bastida dijo en un momento que 'está todo, aunque no se vea'. De esta manera quiso significar que una lectura detenida de los balances regularizados del banco muestran que no falta ni sobra dinero alguno. Lo cual, a su juicio, hace indudable que los accionistas del banco no han sufrido ningún perjuicio.
Más adelante precisó que las cuentas del BV se centralizaron en Amelan, en tanto que la venta de las acciones de las sociedades del BV fueron concentradas en Jersey.
Detalló asimismo que las plusvalías obtenidas de las acciones de Argentaria iban a ser traspasadas al Trust 532 de Jersey, pero finalmente se decidió ingresar esos rendimientos en Amelan.
Entrecanales, por su parte, dijo que desconocía que los fondos por 47,6 millones de dólares utilizados para cubrir las pérdidas de 1994 procedieran de Amelan, aunque reconoció que había sido informado como miembro de la comisión de control de la existencia de esa pérdida. Sobre su fondo de pensión, explicó que Ybarra le pidió su devolución porque el dinero utilizado en su constitución en marzo de 2001 era de origen 'extracontable'.