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Política Pesquera Común

Bruselas aprueba un proyecto de reforma pesquera que obligará a desguazar 1.700 barcos en España

La Comisión Europea ha aprobado un ambicioso proyecto de reforma de la pesca que recortará hasta en un 40% la capacidad de la flota europea y provocará la supresión de cerca de 28.000 puestos de trabajo en un plazo de cuatro años.

El paquete de propuestas de la Comisión Europea para reformar la política pesquera común prevé la supresión de las ayudas públicas a la introducción de nuevos barcos pesqueros y, según estimaciones de la propia Comisión, supondrá el desguace de unos 8.600 barcos en toda la UE, el 8,5% de la flota pesquera comunitaria y el 18,5% de su tonelaje. De aprobarse finalmente la reforma en los términos en los que está planteada, obligará a desguazar 1.700 barcos en España.

Con estas medidas, la Comisión quiere combatir la sobrecapacidad del sector recortando los fondos públicos para la renovación de los buques y aumentando las ayudas sociales. Si el consejo de ministros de la UE aprueba estas propuestas, la medida entraría en vigor el próximo 1 de enero.

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Texto íntegro de la propuesta de reforma del sector pesquero

Según fuentes de la Comisión, las cifras aportadas son estimaciones, porque las propuestas no obligan a desguazar un determinado número de buques, sino que ofrecen incentivos para ello, con el fin de reducir la pesca entre un 30 y un 60%, dependiendo de las distintas especies y caladeros.

Además, el comisario de Pesca, Franz Fischler, propone prohibir todas las ayudas públicas destinadas a aumentar la capacidad de los buques, a crear sociedades mixtas con terceros países y a exportar barcos a otros caladeros fuera de la UE.

Así, los fondos que están asignados a estos objetivos en el IFOP, el fondo estructural para la pesca, podrán reprogramarse y destinarse a incentivos al desguace. Bruselas propone también un fondo adicional de 272 millones de euros para el periodo 2003-2006, destinado a ayudar a los pescadores a encontrar un trabajo alternativo y a la reestructuración del sector. Los buques que tengan que reducir su actividad más de un 25% tendrán derecho a una prima de desguace un 20% más elevada.

En cuanto a las drásticas consecuencias para el empleo en el sector, Bruselas propone reprogramar los fondos asignados en el IFOP a modernización y renovación de flota, lo que permitiría destinar 460,6 millones de euros a la reconversión de empleos. La Comisión estima también que en el futuro podrían ser necesarios otros 88 millones de euros para ayudas sociales.

"Oportunidad perdida"

La vicepresidenta de la Comisión Europea, Loyola de Palacio, que no pudo participar en el debate por encontrarse en Moscú en una sesión del diálogo energético entre la UE y Rusia, hizo llegar a sus colegas una carta en la que lamentó que el colegio se hubiera dejado influir por la "presión mediática" y hubiera "perdido la oportunidad" de proponer una auténtica reforma.

Según el texto al que tuvo acceso EFE, la vicepresidenta reitera sus "serias inquietudes" ante las propuestas y lamenta que la Comisión no haya podido tomar una decisión "con la calma y serenidad necesarias".

A su juicio, "la desgraciada coincidencia de ciertas declaraciones y una gran presión mediática" han impedido que el Ejecutivo comunitario aborde "los verdaderos problemas de fondo" que aquejan al sector pesquero.

La vicepresidenta se declara partidaria de la preservación de los recursos marinos y de una pesca más selectiva, pero critica que la propuesta final se limite a seguir "un enfoque fácil de reconducción de los sistemas históricos de acceso, sin atreverse a razonar en un marco comunitario", y sin pretender "un verdadero mercado interior de la pesca".

El paquete financiero que acompaña a la reforma "contiene más incertidumbres que soluciones", afirma.

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