Compromiso con las pensiones
Las pymes tienen cinco meses de plazo para encargar la gestión a una entidad externa
Formalizar las pensiones de la plantilla es una de las principales tareas pendientes de las pymes para este año. El próximo 16 de noviembre a las empresa se les acaba el plazo para exteriorizar -encargar a un gestor externo- los compromisos por pensiones de sus trabajadores, según la normativa impuesta por el Ministerio de Economía. Desde la Administración ya han anunciado que no habrá más prórrogas.
Las pymes son las que llevan más retraso en este cumplimiento, según el propio Ministerio. La mayoría de las grandes e incluso gran parte de las medianas empresas ya lo han hecho. Las pensiones exteriorizadas ya acumulan 15.000 millones de euros, de acuerdo con los datos de la Dirección General de Seguros y Fondos de Pensiones.
Las pymes tienen tres opciones para sacar de sus balances las pensiones de los empleados: contratar un plan de pensiones conjunto (plan de empleo), un seguro de vida colectivo, cuyo rendimiento se cobre a partir de la jubilación, o bien emplear una fórmula mixta que englobe los dos productos.
Los 15.000 millones ya exteriorizados se reparten de forma equilibrada entre estas dos alternativas. Un total de 157.000 trabajadores cuentan con planes de empleo, mientras que los beneficiarios de un seguro colectivo ascienden a 121.000.
Los compromisos por pensiones -estén formalizados mediante un plan de empleo o mediante un seguro de vida- están destinados a asegurar un complemento a la prestación de la Seguridad Social a la hora de la jubilación. Aunque hay otros dos casos en los que el beneficiario (el trabajador) puede recibir la suma acumulada: en caso de invalidez laboral total y permanente para la actividad que se desempeña o de fallecimiento del partícipe, que puede dar lugar a prestaciones de viudedad u orfandad.
Los sectores que menos se han preocupado por la exteriorización, de acuerdo con los datos del ministerio, son: el de la hostelería y la construcción. Y cita también otras ramas de actividad como la industria del calzado, textil, confección, la del cuero, pastelería, distribución, pastelería y otros negocios de diversa índole.
En estas áreas, son los convenios bien sectoriales o bien provinciales los que regulan las relaciones de las empresas con los trabajadores. Por tanto, son estos acuerdos supraempresariales los que establecen (o deben hacerlo) si la empresa debe contratar una plan o una póliza para asegurar una pensión a sus empleados.
Las únicas empresas que están exentas de la obligación de exteriorizar que impone el reglamento estatal son las que desarrollan su actividad en el área financiera: bancos, cajas y aseguradoras.
Aunque los compromisos aún pendientes de exteriorizar no suponen una cuantía muy voluminosa, son de una importancia esencial porque afectan a miles de trabajadores.
En cualquier caso, tendrá un papel esencial la negociación que se lleve a cabo entre las organizaciones empresariales y los sindicatos para establecer las retribuciones destinadas a la jubilación y a qué trabajadores afectarán, según diversos criterios, como el de antigüedad.
Muchas aseguradoras, conscientes de que los próximos cinco meses y medio encontrarán bastante demanda entre los pequeños y medianos empresarios, ya tienen diseñados productos específicos para pymes.
A esto se añade que la mayor parte de las entidades que venden seguros de vida también comercializa planes de pensiones, especialmente las grandes de este ramo (Caifor -de La Caixa-, Mapfre, Allianz y las aseguradoras del SCH y el BBVA).
El incentivo fiscal
Los expertos consultados coinciden en afirmar que el primer paso para que las pymes lleven a cabo la exteriorización de la forma más conveniente para su estructura es acudir al asesoramiento. Las organizaciones y asociaciones empresariales pueden resolver las dudas que le surjan al empresario y orientarle sobre cuál es la mejor opción.
El empresario debe saber que las aportaciones a los planes de pensiones de sus empleados o el pago de una prima por un seguro de vida cuenta con importantes ventajas fiscales, ya que ambos cuentan con deducciones. Las últimas medidas tomadas por el Gobierno, tanto en la Ley de Acompañamiento de los Presupuestos de 2002 como en la reforma del IRPF para el próximo año, han incrementado estos incentivos.
Así, las cantidades que la empresa destine a los compromisos por pensiones se pueden deducir como gastos en el impuesto de sociedades. Una de las últimas novedades, aprobada a finales del año pasado, y que ya está en vigor para la declaración del presente ejercicio, es la doble deducción. En el caso de los planes de empleo, existe además otra deducción añadida del 10% de lo invertido. De tal forma que, por una parte, la aportación es un gasto deducible en la base imponible y, por otro, también se vuelve a reducir el 10% adicional en la cuota del impuesto.
A esto se suma un aliciente más. La nueva reforma del IRPF dará entrada a una nueva opción de contrato para que las empresas aseguren las pensiones de sus empleados: los llamados seguros clónicos. Son seguros de vida que tienen las mismas características que un plan de pensiones - no pueden rescatarse hasta la edad de jubilación- y cuentan con las mismas deducciones fiscales. Hasta ahora los seguros tenían un peor tratamiento en la declaración. Estos nuevos planes de previsión asegurados -como se denominan técnicamente- comenzarán a comercializarse a partir del próximo año.
La unión de varias empresas en un solo plan
Las pymes van a verse beneficiadas por la reforma que está estudiando el Ministerio de Economía sobre los planes de pensiones colectivos. Con el fin de dinamizar la contratación de planes por parte de los empresarios tiene previsto impulsar la promoción conjunta en este tipo de instrumentos.
El Gobierno quiere permitir que varias pymes puedan unirse para suscribir planes de empleo de promoción conjunta destinados a sus respectivas plantillas. Incluso, dentro de este plan se contempla la posible adhesión a los planes colectivos de los empresarios individuales.
También prevé hacer cambios en las comisiones de control de los fondos de pensiones, que son el órgano que toma las decisiones. Una de las ideas es que en las comisiones de control en pymes donde no haya representación sindical asuma este papel la mesa que negocia el convenio sectorial por el que se rige esa empresa.
El Gobierno pretende fomentar a toda costa la previsión complementaria a la Seguridad Social. Especialmente en las empresas ya que considera que no lo utilizan suficientemente como un incentivo o una forma más de retribución para sus empleados.
'Ni costoso, ni complicado' para la pyme
'No es complicado'. Es el mensaje que lanzan tanto las gestoras de fondos de pensiones como las aseguradoras a las pymes que aún tienen que exteriorizar las pensiones de sus plantillas. Simplemente, deben formalizar el contrato con un gestor externo a la empresa.
La propia directora general de Seguros y Fondos de Pensiones, Pilar González de Frutos, ha declarado que 'lo que queda por hacer' en el proceso de exteriorización 'no es ni difícil ni costoso'. Y ha insistido categóricamente en que 'no veo ninguna razón' para que se produzca una nueva prórroga, dijo en una entrevista con este periódico.
A su juicio, es esencial que la previsión social complementaria pase a constituir una parte fundamental de las negociaciones entre los sindicatos y las empresas. De esta forma, se impulsaría de forma más efectiva las pensiones complementarias.