Los Quince encargan a expertos propuestas para avanzar en la fiscalidad sobre consumo de energía

Los Quince mantuvieron un primer debate sobre las directrices futuras de la normativa comunitaria de imposición sobre la energía, con el fin de alcanzar un acuerdo sobre la directiva (ley-marco) que propuso la Comisión Europea hace cinco años y que aún no ha recibido el apoyo del Consejo de Ministros.

El grupo especial tendrá que avanzar tanto en el ámbito de la fiscalidad energética como en el de los biocarburantes, para lograr la base de un acuerdo que permita alcanzar un compromiso sobre imposición sobre el consumo energético antes de finales de 2002.

La cuestión de las eventuales derogaciones en su aplicación, que reclaman varios de los Estados miembros, y la definición de los consumidores industriales o de elevado empleo de energía fueron dos de las líneas fundamentales a las que aludieron los ministros.

La presidencia española de la UE presentó a los Quince una serie de directrices para favorecer la aproximación entre las diferentes posiciones y en las que se incluye la referencia al alcance de las exenciones o la diferenciación entre usos doméstico y profesional.

Esas directrices incluyen el principio de que los productos energéticos sólo se deberían tasar cuando se empleen como combustible de motores o de calefacción, el tratamiento diferenciado entre empresas y consumidores domésticos y el de la necesidad de definir las industrias de mayor uso de energía.

Además, se autorizaría una "mayor flexibilidad" para permitir que cada Estado pudiera aplicar tipos diferenciados en áreas específicas y se sugiere que se permita un tratamiento más favorable para el consumo de gasóleo destinado al transporte de bienes y personas.

En las directrices presentadas por la presidencia de turno española se introduce la posibilidad de excluir la imposición del uso de electricidad, gas natural, carbón y combustibles sólidos para determinados usos domésticos y caritativos.

Para los productos ya sometidos a impuestos armonizados en la Unión -los hidrocarburos- las directrices plantean entre otros tipos mínimos (para los empleados en motores) de 421 euros por cada mil litros en gasolina con plomo, 359 euros por mil litros para la sin plomo, 302 euros para el gasóleo, 125 euros por cada mil kilogramos de gas de petróleo licuado y 2,6 euros por gigajulio de gas natural.

En cuanto a los utilizados para calefacción, la base propuesta es un tipo mínimo de 21 euros por cada mil litros de gasóleo, 15 euros por cada mil kilogramos de gasóleo pesado y tipo cero para el queroseno y el gas de pétroleo licuado.

Además, se mantiene, tal como acordaron los líderes de la UE en Barcelona, que el acuerdo sobre la directiva de armonización de la fiscalidad energética deberá tener en cuenta las necesidades particulares del sector del transporte por carretera.

Para los productos energéticos sin impuestos armonizados en la Unión, las directrices incluyen la propuesta de un tipo mínimo de 0,15 euros por gigajulio de gas natural (para consumo industrial) y de 0,30 euros por gigajulio para usos domésticos.

Se añade que los Estados podrán aplicar exenciones o reducciones si su cuota de gas natural en el consumo final de energía era inferior al 15 por ciento en 2000, en cuyo caso podrían aprobar aquellas para un período de hasta diez años o hasta que esa cuota alcance el 25 %.

Para el carbón se indica la posibilidad de fijar un mínimo impositivo de 0,15 euros por gigajulio en consumo industrialy 0,30 euros por gigajulio para el consumo doméstico, con tipo cero si el carbón se emplea para generar electricidad, en procesos de reducción química, electrolíticos y metalúrgicos y en sectores como el cemento, el vidrio y la cerámica.

En la electricidad, las directrices debatidas incluyen un mínimo de imposición de 0,50 euros por megawatio/hora en consumos industriales y 1 euro por megawatio/hora para el doméstico.

Por último, los Estados quedarían libres para excluir de la aplicación de la directiva los biocarburantes, siempre que no haya un exceso de compensación por sus costes adicionales de producción, y la energía procedente de las fuentes renovables.

Rato asegura que la Directiva no incrementará los impuestos

El vicepresidente segundo de la Comisión Europea y ministro de Economía, Rodrigo Rato, aseguró hoy que la Directiva europea sobre fiscalidad de la energía que están preparando los Quince "no supondría en el caso español una elevación de impuestos".

Según explicó Rato en rueda de prensa al final de la reunión, esta nueva normativa "supondría estructuras distintas en el impuesto de la electricidad pero el mínimo sería menor que el actual que hay en España". Lo mismo ocurrirá con los demás subsectores, a excepción del gasóleo utilizado por particulares, donde se crearían "periodos transitorios largos".

En cualquier caso, dijo, "no vemos, desde nuestro punto de vista, que la propuesta suponga una elevación de los impuestos sobre la energía en España partiendo de la base de los tipos mínimos".

El presidente de Iberdrola pide que la ecotasa sobre el consumo eléctrico se aplique al gas

El presidente de Iberdrola, Iñigo de Oriol, pidió hoy que la ecotasa que estudia la Unión Europea para actualizar la fiscalidad de la electricidad se aplique también y en condiciones similares al sector del gas.

Tras su comparecencia en la subcomisión de infraestructuras energéticas del Congreso de los Diputados, De Oriol se preguntó "por qué los eléctricos tendrían que pagar esto y el gas no". No obstante, señaló que el Gobierno no ha planteado a Iberdrola este nuevo impuesto, del que aseguró haberse enterado "por la prensa". Iñigo de Oriol abordó en la subcomisión el proyecto de planificación energética para la proxima década que elabora el Ejecutivo, un documento que calificó de "esfuerzo muy importante y positivo del Ministerio de Economía".

En su opinión, se echa en falta en ese documento una instrumentalización de los objetivos de la planificación energética, al objeto de definir un futuro del sector para poder realizar las "importantes" inversiones previstas. "Con el espíritu de diálogo que estamos teniendo permanentemente con el Ministerio espero que se resuelva", añadió. Asimismo, Iñigo de Oriol consideró necesario que las tarifas eléctricas recojan los costes de la energía y todos los costes recurrentes de la misma.

Subida de tarifas

"En ese espíritu estamos trabajando y yo espero que la senda de una bajada en los últimos cinco años de más del 30 por ciento de la tarifa eléctrica se acabe si se sigue creciendo como hasta ahora", explicó el presidente de Iberdrola, quien instó al Ejecutivo a tener en cuenta que el consumo creció un 5,3% en el primer trimestre, frente al 3,7 previsto a la hora de fijar las tarifas.

A juicio de Iñigo de Oriol, "esto hace que se tengan que revisar una serie de baremos y de parámetros que llevan implícita una subida de las tarifas".

La OCU critica la eurotasa sobre el consumo eléctrico

 

 

El director general de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), José María Múgica, criticó la eurotasa que estudia hoy el Ecofin en Bruselas, al considerar que supondrá un incremento de la presión fiscal, de las tarifas y de los precios de los productos energéticos. Múgica aseguró que los impuestos "no hacen más que subir en España", pese a las promesas del Gobierno de reducir la presión fiscal. Asimismo, Múgica señaló que a los consumidores "no les valen las justificaciones" del Gobierno a la hora de adoptar este tipo de medidas y abogó por una armonización con Europa no sólo fiscal, sino también "salarial, profesional y de nivel de vida".