El BCE deja los tipos en el 3,25% y pide moderación salarial para contener los precios
La autoridad monetaria también dejó sin cambios la facilidad marginal de crédito, por la que presta dinero a las entidades, en el 4,25%, así como la facilidad de depósito, por la que remunera el dinero, que mantuvo en el 2,25%.
El BCE considera que las perspectivas para la estabilidad de los precios en los próximos meses "son menos favorables que a finales del pasado año", y reconoce que la evolución de la inflación ha sido menos satisfactoria de lo que se esperaba.
Wim Duisenberg, presidente del banco central europeo, dijo hoy que "aún es posible" que la inflación baje del 2%, tope fijado por el BCE, en los próximos meses, si bien ello dependerá principalmente "de la evolución del precio del petróleo".
Duisenberg expresó también su preocupación por las negociaciones salariales en marcha en algunos países de la eurozona y añadió que una subida excesiva de los salarios podría traer consecuencias negativas "no sólo para los precios, sino también para el empleo".
"Las proyecciones para la evolución de los precios el próximo año dependerán en gran medida de la moderación salarial", señaló el banquero holandés.
Recuperación incierta
En cuanto al crecimiento económico, Duisenberg dijo que sus perspectivas siguen siendo "inciertas", lo que, unido a un mayor pesimismo sobre la evolución de los precios, llevó hoy al consejo de gobierno del banco europeo a mantener los tipos de interés en el actual 3,25%.
"Aún hay una gran incertidumbre respecto a la fortaleza de la actual recuperación debido, entre otras causas, a la evolución de los precios del petróleo y al impacto de ciertos desequilibrios en la economía mundial", dijo.
Sin embargo, el banquero holandés se mostró convencido de que el crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) de la zona euro este año "estará en línea con su valor potencial".
Además, destacó que la mejora en la situación internacional contribuirá a estimular las exportaciones de la eurozona.
La rueda de prensa de hoy ha sido la última que ha contado con la presencia de Christian Noyer, vicepresidente del BCE, ya que el economista galo abandonará su cargo el próximo 31 de mayo y será sustituido por el actual gobernador del Banco de Grecia, Lucas Papademos.
Al final de su intervención, Duisenberg dedicó unas palabras de agradecimiento y despedida a Noyer y alabó su labor en la vicepresidencia del banco.
Duisenberg agradece a Noyer los servicios prestados
Wim Duisenberg agradeció hoy al vicepresidente saliente, el francés Christian Noyer, los servicios prestados en sus cuatro años de mandato en este cargo desde junio de 1998.
Noyer, que ha acompañado a Duisenberg en casi todas las ruedas de prensa mensuales que ofrece después de la reunión del consejo de gobierno de la entidad, concluirá su labor en la sede del BCE el 31 de mayo próximo para ser sustituido por el actual gobernador del Banco de Grecia, Lucas Papademos. El vicepresidente galo se ha caracterizado por su discreta actuación ante los medios de comunicación, pese a participar en las ruedas de prensa mensuales.