Annan se inclina por deshacer el equipo de investigación de Yenín
El secretario general de la ONU, Kofi Annan, se mostró ayer favorable a desmantelar el equipo de expertos que esperaban en Ginebra para viajar a Israel e investigar lo ocurrido durante la ocupación israelí del campo de refugiados de Yenín. Annan respondía así a la imposibilidad de que la misión inicie su trabajo por la negativa del Gobierno israelí a colaborar.
Fuentes diplomáticas reconocían ayer dos posibilidades ante tal tesitura: mantener el equipo en espera en Ginebra, donde se encuentra en estos momentos, o desmantelarlo ante la previsión de que no pueda realizar su trabajo.
'El secretario general está inclinado a desmantelar el equipo, y así lo he informado al Consejo de Seguridad', afirmó en una breve declaración a la prensa el subsecretario general para Asuntos Políticos de la organización, Kieran Prendergast.
El equipo de la ONU espera en Ginebra desde el miércoles pasado y ha tenido que posponer varias veces su llegada a Yenín, prevista en un principio para el sábado pasado, por el rechazo de Israel. El gabinete de seguridad del Gobierno de Ariel Sharon decidió ayer no cooperar con la misión.
La excusa aducida es que la ONU no ha cumplido con sus requerimientos. Sharon quería que fuera su Gobierno quien decidiera quiénes serían los testigos en el juicio, y exigía inmunidad para ellos por los delitos que podrían conocerse de su declaración. 'Cualquier intento de difamarnos o ponernos en un juicio ante el mundo no prosperará. Ningún otro ejército ha actuado con tan altos estándares morales', afirmó ayer Sharon.
Sin embargo, el rumor más extendido es que Sharon aceptó una propuesta del presidente de EE UU, George Bush, para liberar al líder palestino, Yasir Arafat, a cambio de suspender la misión en Yenín. Así lo afirmó Ahmed Abdul Rahman, secretario del gabinete de la Autoridad Nacional Palestina (ANP). 'Es una vergüenza para toda la comunidad internacional y para todos los países que ponen los derechos humanos como parte de su política exterior', añadió.
Los palestinos denuncian que durante la ocupación el Ejército israelí mató a cientos de personas, mientras que Israel rebaja esta cifra hasta 50.
Ayer, las tropas israelíes comenzaron la retirada de la ciudad de Hebrón, cuya ocupación, el lunes, dejó nueve muertos, según fuentes palestinas. Sharon respondía así a las presiones de Bush, que volvió a pedirle su retirada de los territorios palestinos y que se abstuviera 'de más incursiones'.
Entre tanto, un grupo de 28 personas salieron ayer de la Basílica de la Natividad en Belén. El jefe negociador israelí, Marcel Aviv, afirmó que hasta ahora han salido 88 hombres del templo y que dentro quedan alrededor de 140 personas, entre ellas 'algunas decenas de hombres armados'.