Los soportes, otra vez a prueba
El mantenimiento del Ibex por encima de los 8.000 puntos durante las últimas semanas ha obedecido a la combinación armónica de procesos alcistas y bajistas entre los valores líderes del mercado. O lo que es lo mismo, desde hace ya algún tiempo se ha observado que la debilidad de Telefónica y de su grupo era suplida por la mejora de los bancos, y viceversa.
Lo peor es que este coro desafine, se salga del guión y que cada uno interprete su propia melodía, porque ésta, a la postre, es tragicómica. Lo peor es que los valores de más peso en la Bolsa española rompan la baraja que mantiene en vilo al principal índice y que los soportes se pierdan.
Hasta ahora, la referencia de los 8.000 puntos ha tenido un poder especial de persuasión, si bien no refleja mejora en términos anuales. Esta cota ha avisado de la entrada de dinero en el mercado de acciones y de los soportes de muchos valores, es decir, de la negativa a ceder más posiciones. La pérdida de este nivel conlleva, además, otros apuntes técnicos muy negativos.
Son muchos los gestores y profesionales de la Bolsa, así, los que han fundamentado sus movimientos con la vista puesta en los 8.000 puntos al considerarlos una magnífica oportunidad de entrada. Si la situación sigue débil, que es lo que ahora sucede, donde dijeron dijo los expertos dirán Diego y, lo que es peor, desencadenan movimientos bajistas más fuertes al entrar en funcionamiento programas técnicos de venta que autoalimentan el proceso.
La situación de la Bolsa en la recta final de abril es igual a la que se daba en el comienzo del mes. El despiste es generalizado. El último es el gran debate surgido con la publicación el viernes del PIB de Estados Unidos. Unos dicen que es más débil de lo previsto, tras analizarlo detenidamente. Otros, que la subida de tipos de interés está más cerca.