González fuerza la dimisión de los tres últimos consejeros del BBVA con fondos
El BBVA celebró ayer un consejo extraordinario, el segundo en una semana, en el que se comunicó la dimisión de los tres consejeros procedentes de BBV e imputados en la causa abierta por el juez Baltasar Garzón que aún permanecían en la entidad: Ramón de Icaza, Javier Aresti y Luis María Ybarra. Es la quinta oleada de dimisiones en cuatro meses. En la vertiente judicial, la Fiscalía Anticorrupción recurrió ayer el auto dictado el jueves por el magistrado de la Audiencia en el que decidió no imputar al secretario de Estado de Hacienda, Estanislao Rodríguez-Ponga, y al consejero delegado del BBVA, José Ignacio Goirigolzarri. Los imputados tienen a partir de ahora 30 días para articular sus defensas.
El presidente del BBVA, Francisco González, decidió en la noche del jueves reunir nuevamente al consejo de administración del banco urgentemente para el día siguiente. Esta reunión, celebrada en la tarde de ayer, cogió por sorpresa a todos los miembros del máximo órgano de control del banco.
En esta ocasión, los tres consejeros vascos que aún se habían resistido a abandonar el consejo, Ramón de Icaza, Javier Aresti (marido y hermano, respectivamente, de la senadora del PP Pilar Aresti) y Luis María Ybarra, presentaron su dimisión.
æpermil;sta era la segunda vez que el presidente del banco convocaba consejo extraordinario por sorpresa en la misma semana. La razón: el auto del juez de la Audiencia Nacional, Baltasar Garzón, en el que se imputa a 24 administradores del BBVA y a 'los miembros del consejo de administración del BBV que se determinen y que hubieren firmado las cuentas anuales de 1996 a 1999, e excepción de los administradores que no conocían la presunta desfiguración contable'.
La mayoría de estos imputados está ya fuera del BBVA, a excepción de Icaza, Aresti y Luis María Ybarra, que habían resistido en el consejo hasta ahora, a pesar de las reiteradas peticiones de González para que abandonaran el banco.
De la lista de imputados de Garzón, aún siguen tres ejecutivos: Carlos Delclaux, Manuel López López y Gabriel Moreno. Todos ellos imputados por el caso BBVA Privanza, aunque Manuel López también está imputado desde el jueves por Garzón por apropiación indebida.
La intención de González ayer era volver a pedir la dimisión de los tres consejeros imputados por Garzón por apropiación indebida (Icaza, Aresti e Ybarra eran algunos de los 22 beneficiarios de fondos de pensiones creados al margen de la contabilidad del banco) .
Los tres consejeros se habían resistido hasta ahora a salir del consejo, ya que sus abogados habían considerado siempre que era mejor para su defensa mantenerse vinculados al banco. Pero no ha sido hasta ayer, una vez conocida la lista de imputados por Garzón, cuando han presentado su dimisión, en un consejo de más de tres horas y que, según fuentes conocedoras de esta reunión, estuvo 'cargado de tensión'.
Portavoces del banco, por su parte, señalaron ayer tras estas dimisiones que 'el consejo ha estimado que aunque la sola imputación de estos consejeros no deba implicar, según el estatuto de este órgano, la obligación de poner el cargo de consejero a disposición del banco, dada la naturaleza de las circunstancias en este caso, y por el bien de la entidad, los tres consejeros debían dejar sus cargos'.
Según el estatuto del consejo del BBVA, sólo 'si un consejero es procesado o inculpado por un hecho presuntamente delictivo, o es sancionado por una infracción muy grave relacionada con la actividad financiera o del mercado de valores, debe poner su cargo a disposición del consejo de administración, comprometiéndose a aceptar la decisión que se tome'.
Dos consejos en tres días
æpermil;ste es el segundo consejo de administración extraordinario que se convoca en la misma semana. El martes, González, tras su llegada a Madrid (estaba en Nueva York), reunió a todos los consejeros del banco en Azca (Madrid), sede operativa de la entidad. El consejo fue convocado por la mañana y se celebró por la tarde. Esta precipitación provocó que los tres consejeros vascos, Icaza, Aresti y Luis María Ybarra, no pudieran asistir, aunque al final participaron en el acto por videoconferencia.
La premura en esta reunión era lógica. El fiscal Anticorrupción, Carlos Jiménez Villarejo, había pedido ese mismo día la imputación del consejero delegado del BBVA, José Ignacio Goirigolzarri. Ante estos hechos, el presidente del banco, no lo dudó, había que emitir un mensaje de tranquilidad y apoyar a Goirigolzarri, nombrado consejero delegado el pasado 18 de diciembre a propuesta del propio González.
El resultado fue un comunicado suscrito por todo el consejo (incluidos los tres consejeros ayer salientes) en el que se apoyaba 'sin reservas' a Goirigolzarri.
Tras esta dimisión producida ayer, el consejo del BBVA queda integrado por 12 miembros, de los cuales 10 pertenecen al cupo de Argentaria, uno a Telefónica, y sólo José Ignacio Goirigolzarri pertenece al cupo BBV, aunque no entró en el consejo hasta el 18 de diciembre.
A este consejo se unirá el próximo 7 de mayo Ricardo Lacasa. En esa fecha está previsto un consejo ordinario en el que se aprobarán las cuentas trimestrales del BBVA y se ratificará el nombramiento de Lacasa como consejero. Este consejo estaba previsto inicialmente para el 30 de abril. Pero Goirigolzarri ha decidido cambiar la forma de presentación de los resultados, que en lugar de explicarse y formularse por América y sin América, ha optado por presentarlos por negocios, como hace el SCH. Ello ha provocado un cambio informático, lo que ha retrasado 10 días este consejo.
En el sector financiero se especulaba con la posibilidad de que Lacasa no entrase en el consejo hasta que se calmara la situación en el BBVA, pero la no imputación, por el momento, de Goirigolzarri ha tranquilizado los ánimos en el banco.