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Confusión

Banesto retira su opa de exclusión, pero un error de la CNMV desata la confusión

Banesto canceló ayer sus planes de excluir la sociedad de Bolsa. Para no perjudicar al accionista, mantendrá una orden de compra de acciones a 15 euros durante un mes. Esta información no llegó bien al inversor, entre otras cosas porque la página de Internet de la CNMV estaba estropeada. Cuando se levantó la suspensión de negociación, algunos inversores vendieron acciones. El valor cayó, la CNMV volvió a suspender a Banesto y finalmente la cotización remontó.

La confusión generada en torno a la retirada de la opa de exclusión de Banesto costó cara a más de un accionista. La CNMV suspendió la cotización del banco para que se aclarase si iba o no a retirar la opa de exclusión solicitada en febrero. La información había sido publicada por el diario El País y fue confirmada en un hecho relevante mientras la cotización estaba suspendida.

El banco, el 98,5% de cuyo capital está en manos de Santander, informó en dicho hecho relevante que mantendría durante 30 días una orden de compra de acciones propias a 15 euros, el mismo precio al que iba a excluir la acción. El efecto de la retirada de la opa era, pues, neutro.

El banco explicó, asimismo, que iba a impulsar la contratación de acciones en el mercado. Para ello, prevé lanzar una oferta pública de venta de acciones para que el capital flotante de Banesto llegue al 10% y sea, pues, un valor líquido. Además, desde que termine la orden permanente de compra de acciones a 15 euros y hasta que se haga la OPV, un banco ajeno al grupo Santander dará liquidez al valor. La operación, pues, estaba diseñada para no perjudicar al accionista.

Pero la página de Internet de la CNMV no funcionaba, de modo que los inversores no pudieron tener conocimiento de toda esta información. Así, cuando la cotización se reanudó a las 12.07, hubo quien vendió acciones. La acción cayó en picado hasta los 14,35 euros, un 3,5% por debajo del precio de cierre del miércoles.

La confusión se corrigió rápido, pero sólo en parte. La acción subió a los 14,60 euros en cuestión de minutos. Pero seguía siendo un precio absurdo si Banesto iba a recomprar acciones a 15 euros. La CNMV suspendió de nuevo la cotización a las 13.07, una hora después de haberla reanudado. Entonces colgó en Internet el hecho relevante de Banesto, fechado en teoría a las 11.15, donde se informaba plenamente de la operación. La acción volvió a cotizar a las 14.30 a 14,98 euros por acción, para cerrar en 14,88.

Durante el periodo de confusión en torno a las 13 horas, se movieron 271.815 acciones, según Bloomberg. En toda la sesión se negociaron 1.176.415 títulos. La media diaria de las 20 sesiones anteriores fue inferior a los 8.000 títulos. Santander tiene el 98,5% del capital de Banesto.

Giro de 180 grados con Ana Patricia

 

La decisión de mantener en Bolsa Banesto vino de Ana Patricia Botín. La hija de Emilio entró en el banco el 13 de febrero, en sustitución de Alfredo Sáenz. Había sido sacrificada en aras de la fusión entre Santander y Central Hispano, pero volvió por la puerta grande cuando los Botín recuperaron el control de SCH.

 

 

 

 

 

 

 

Dos días antes de la llegada de Patricia el banco había remitido a la CNMV toda la documentación para pedir la opa de exclusión. Dos meses después, la marcha atrás decidida por Ana Patricia ha sido comunicada públicamente, aunque con algo de confusión de por medio.

 

 

 

Según el banco, la cotización en Bolsa otorga más transparencia al banco, por las obligaciones de información financiera que conlleva el estar en el parqué. Ana Patricia señaló ayer que 'es bueno para la franquicia y añade transparencia, eso hemos planteado a la comisión'. Para que la presencia en Bolsa no sea testimonial, Banesto intentará convertirse en un valor líquido sacando más papel al parqué.

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