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Coyuntura

La confianza empresarial alemana cayó en abril

El índice de confianza empresarial de Alemania bajó inesperadamente en abril, lo que hace temer que la recuperación de la primera economía de la zona euro vaya a ser más lenta de lo previsto inicialmente por los expertos. La noticia fue recibida con pesimismo por los inversores de las Bolsas europeas, que confiaban en que un nuevo repunte de la confianza ratificara la reactivación germana.

El índice, calculado por el instituto económico IFO, alcanzó en abril 90,5 puntos, frente a 91,5 puntos de marzo, lo que supone el primer descenso tras cinco meses de alzas consecutivas.

Los expertos contaban con que la tendencia alcista continuase en abril y con que el indicador alcanzase, al menos, 92,2 puntos.

Los analistas responsabilizan del descenso de la confianza de los empresarios a la subida del precio del crudo registrado desde el inicio del año, la principal materia prima energética se ha encarecido casi un 29%, y a la amenaza de huelga en Alemania tras el fracaso de las negociaciones por el convenio colectivo en el sector del metal.

El poderoso sindicato IG Metall, segundo del país, consulta estos días a sus afiliados la posibilidad de convocar paros a partir del próximo 6 mayo. El sindicato, que negocia los salarios de 3,6 millones de trabajadores de los sectores del metal, automóvil y electrónica, pide un incremento salarial del 6,5% para este año y el próximo, mientras que la patronal sólo está dispuesta a ofrecer subidas del 3,3%.

En este contexto, Gernot Nerb, economista del instituto IFO, considera que las posibilidades de recuperación de la economía alemana no empeoran por el mal dato de confianza empresarial. 'La tendencia al alza de este indicador se mantiene', manifestó Nerb. El economista germano calificó el retroceso del índice en abril de 'provisional' y lo achacó al empeoramiento que ha sufrido el sector del comercio al por menor en el último mes.

Christoph Hausen, experto del banco alemán Commerzbank, coincidió con Nerb y aseguró que el pesimismo mostrado por los empresarios en el mes de abril 'no es motivo de preocupación, ya que el sector industrial no ha experimentado un retroceso'. 'En los últimos meses el índice había subido con fuerza y no es extraño que ahora se produzca una bajada', dijo.

Según las previsiones del Fondo Monetario Internacional y de los principales institutos económicos de Alemania, la economía del país crecerá un 0,9% este año, frente a un ritmo del 0,6% registrado durante el ejercicio de 2001. Por su parte, el Gobierno tiene una previsión más modesta y apuesta por un crecimiento de sólo el 0,75% este año.

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