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SCH

Botín recalca que la situación en Argentina 'no invita al optimismo'

El presidente del Santander Central Hispano, Emilio Botín, rebajó ayer las expectativas sobre Argentina y en un tono algo más pesimista que en otras ocasiones recalcó que 'la situación no invita al optimismo'. El banco invertirá 270 millones en un macrocomplejo financiero, que albergará la sede operativa de la entidad.

El presidente del Santander Central Hispano, Emilio Botín, expresó una visión más sombría sobre la evolución de la crisis argentina que en la junta de accionistas del pasado mes de febrero. 'La situación no invita al optimismo', subrayó ayer en dos ocasiones durante la presentación de la Ciudad Financiera del SCH.

Tanto el SCH como el BBVA ya dejaron claro en enero, cuando se canceló la paridad fija entre peso y dólar, que, si el sistema financiero quiebra, ambos cerrarán sus filiales. Así se lo comunicaron al Gobierno. El SCH cuenta con el 79,82% del Banco Río de la Plata y el BBVA, con el 68% del Banco Francés.

En cualquier caso, Botín no quiso traslucir una sensación de abierto pesimismo y añadió que, 'como siempre, yo no pierdo la esperanza de que se arreglen las cosas'.

El mercado especula con la salida del banco del país si la situación no experimenta una mejoría palpable. Los expertos creen que no sería una medida individual y que el SCH y el BBVA lo decidirían de mutuo acuerdo con el resto de la banca extranjera presente en Argentina.

Ni siquiera la presión política serviría para evitar la retirada, en el caso de una situación financiera insostenible, dicen los expertos consultados. Su premisa es esperar y observar la evolución.

La retirada de los dos bancos conllevaría unas pérdidas millonarias, pero ambos se han cubierto parcialmente las espaldas con abultadas provisiones. El SCH ya dotó 1.700 millones de euros en 2001 y el BBVA, 1.600 millones para cubrir el riesgo en el país. Además, entre los dos han repatriado más de 300 millones de euros de sus filiales.

Primer campus financiero

Por otra parte, el SCH presentó ayer el proyecto para construir el mayor campus financiero del mundo, de 160 hectáreas, en el municipio madrileño de Boadilla del Monte. El banco traspasará allí los servicios centrales, donde trabajarán 5.000 empleados. Estudia trasladar también Banesto. El SCH prevé ingresar 540 millones por la venta de 14 edificios que posee en Madrid y desocupará otros 11 que tiene en alquiler. Con las plusvalías de la venta (estimadas en 300 millones) financiará los 270 millones que costará la Ciudad Financiera.

El banco prevé un ahorro de costes del 30% en servicios centrales, de 50 millones anuales. El complejo, que estará listo en 2004, contará con 100.000 metros cuadrados de oficinas, un campo de golf de 18 hoyos, instalaciones deportivas, guardería, auditorio y hotel, entre otras infraestructuras. El fin es mejorar la eficiencia de los empleados. más información en la Página 30

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