Aparente contradicción
Los directivos que han respondido a la encuesta de Esade-Consultur indican que el primer negocio del futuro es la gestión de eventos y el segundo, construir hoteles. Es decir, si queremos tener éxito, tenemos que aprovechar la planta existente impulsando actividades puntuales, relacionales e innovadoras -ni más ni menos, eso es la gestión de eventos- para inmediatamente después seguir construyendo hoteles. Construir y no construir a la vez. ¿No parece curioso?
Puede parecer contradictorio, pero realmente no lo es. ¿Por qué? Porque crece en general el espacio dedicado al turismo de ocio y de negocios en sus facetas de costa, de ciudad y de interior: alojamiento, restauración, valorización de los diversos recursos y atractivos mediante espacios naturales, playa, marinas; museos, folclore, gastronomía; know-how al servicio del turismo de negocios, de reuniones y congresos; tecnologías, infraestructuras, etc.
Además, la planta turística aumenta por tres motivos: porque se incrementa el número de turistas y visitantes a los lugares clásicos, porque se abren nuevos destinos y porque el gasto turístico se dispara año tras año bastante por encima del aumento del número de visitantes.
La respuesta a la encuesta de Esade-Consultur encuentra en medio de este pandemónium su justa y, por cierto, nada contradictoria respuesta. La capacidad de competir en este escenario de fuerte y continuado crecimiento de demanda puede desarrollarse tanto a través de iniciativas que generan una mejora de la ocupación y de uso de la planta existente (hoteles, restaurantes, salas de conferencia, museos, etc.) como de proyectos de creación de nueva planta. ¿Por qué los encuestados identifican esta nueva planta con el sector hotelero? Porque se trata del subsector turístico más consolidado en los aspectos del management general y porque consideran que a la hotelería urbana, en concreto, le queda todavía un largo recorrido.