La Xunta de Galicia acusa a las petroleras de pactar los precios
El conselleiro de Industria, Juan Rodríguez Yuste, anunció ayer ante la Cámara gallega que iniciará un expediente ante el TDC para que verifique la posible existencia de un "pacto" entre las distribuidoras para fijar los precios del combustible en Galicia, lo que supone que ésta sea una de las comunidades con los carburantes más caros.
Yuste explicó que la Xunta ha realizado estudios durante los dos últimos años en los que se detecta la posible existencia de "monopolios por zonas". Ante esta situación, encargará al TDC que investigue si el alza de los carburantes en Galicia se debe a "una táctica" monopolística de las distribuidoras.
De hecho, de los estudios realizados por Industria se desprende que la mayor parte de las gasolineras gallegas ofrecen precios "muy similares, sin apenas diferencias", lo que podría ser indicativo de "una falta real de competencia", según apuntó Rodríguez Yuste.
Explicó ante la Cámara gallega que la mayoría de los operadores se abastecen de la refinería de A Coruña o del punto de descarga de Vigo, por lo que los precios de compra son prácticamente los mismos para todos ellos. Así, admitió que el poliducto A Coruña-Vigo no está teniendo repercusiones positivas en la bajada del precio de los carburantes, ya que esta infraestructura para el transporte de combustibles no está conectada a la red nacional.
El "aislamiento" del oleoducto A Coruña-Vigo motiva que las actividades logísticas de transporte y almacenamiento sean realizadas en régimen de "prácticamente monopolio" por CLH, lo que derivaría, según Yuste, en que los operadores "no encuentren razones reales para competir entre ellos".
En Galicia existen más de 30 operadores autorizados para distribuir carburantes, pero realmente Repsol YPF y Cepsa concentran el 70% de la cuota de mercado, de forma que en la práctica, son éstas las que establecen el precio y el resto de los operadores se limitan a seguir sus pautas. Esto se traduce, a juicio del titular de Industria, en "una falta real de competencia".
Rodríguez Yuste anunció también otras medidas para defender la libre competencia, como el inicio de un estudio para detectar posibles monopolios por zonas, sustentados en la concentración geográfica de los abaratamientos de los distintos operadores. El establecimiento de puntos de venta de combustibles en áreas comerciales y grandes superficies y el incremento de la información sobre los precios, dando publicidad a las estaciones más baratas para informar a los consumidores, son otras de las propuestas anunciadas por Industria.
Asimismo, la Administración autonómica está considerando la posibilidad de crear otros puntos de entrada y de almacenamiento de productos petrolíferos en Galicia, como el estudio de la viabilidad a medio plazo de un poliducto de conexión con Asturias y otro con el Norte de Portugal.
Por su parte, el presidente de la Xunta, Manuel Fraga, aseguró hoy que "lo primero es ver la posibilidad de que exista algún acuerdo contra las leyes de la competencia y agotar esa línea".
En su opinión, todas las medidas que se adopten pasan porque "las compañías cumplan con sus obligaciones". Al mismo tiempo, consideró que "hay problemas que tienen que ver con la naturaleza de los trayectos y de dónde están las refinerías más próximas" y admitió la existencia de "algunos problemas técnicos".