Comentando el Informe Lagares...
La pasada semana se dio el pistoletazo de salida a la reforma del impuesto sobre la renta de las personas físicas con la publicación del informe elaborado por una comisión de expertos presidida por Manuel Lagares Calvo. Las recomendaciones que ha planteado la comisión se han centrado básicamente en mejorar el tratamiento fiscal de la familia y los discapacitados, revisar el tratamiento fiscal de los rendimientos del trabajo y favorecer su movilidad, establecer un tratamiento fiscal más neutral para el ahorro y potenciar los sistemas de previsión social, reducir la tarifa del impuesto, revisar el régimen de transparencia fiscal y finalmente avanzar en la simplificación del impuesto y en la lucha contra el fraude fiscal.
Las propuestas planteadas siguen una línea continuista de la reforma ya realizada en 1998, avanzando en la rebaja del impuesto, abordando muchos de los problemas de la actual regulación, aunque no se tratan determinadas reivindicaciones planteadas por los profesionales del sector.
Aspectos positivos. En primer lugar, la comisión apuesta por una reducción del tipo marginal mínimo de la tarifa, así como del tipo de gravamen aplicable a la parte especial de la base imponible, pasando en ambos casos del 18% al 15%. En segundo lugar, la comisión aborda la problemática relativa a la neutralidad fiscal de los productos financieros en los que puede materializarse el ahorro proponiendo que todos los rendimientos del capital mobiliario generados en un periodo superior a dos años se integren en la parte general de la base imponible previa aplicación de un coeficiente reductor del 40%, y en el caso de generarse en un periodo superior a cinco años un coeficiente reductor del 70%. Asimismo se adopta una de las grandes demandas planteadas por los profesionales del sector de no establecer trabas fiscales en la movilidad entre fondos de inversión. De esta forma se recomienda la eliminación del peaje fiscal que hay que pagarse actualmente por cambiar de producto de ahorro. Finalmente también puede valorarse muy positivamente la creación de una deducción a favor de las mujeres con hijos menores de tres años, con especial incidencia para aquellas mujeres que han de desarrollar su trabajo o actividad económica fuera del hogar familiar.
Aspectos negativos. En primer lugar puede calificarse de timorata la propuesta de reducción del tipo marginal máximo de la tarifa del impuesto. Con la actual reforma del IRPF se dispone de una oportunidad única de entrar en el grupo de países pioneros en la rebaja de la tributación directa (40%), si bien la recomendación de la comisión es que no sea superior al 45%. La comisión no ha abordado la problemática derivada de la reducción del límite conjunto del IRPF y del IP (70%) como una apuesta decidida para aumentar la renta disponible de los contribuyentes y evitar que la imposición directa devenga confiscatoria.
En segundo lugar también se echa en falta que la comisión, al analizar los incentivos para mejorar el tratamiento fiscal de las familias, no se plantee la aplicación del splitting (división, como método para corregir los efectos de la acumulación de rentas). Se trata de una demanda exigida por los profesionales del sector y ya implantada en países de nuestro entorno.
Por otra parte si bien consideramos muy positivo el establecimiento de un régimen de neutralidad en el ahorro, ello puede suponer que los seguros pierdan las ventajas fiscales de que disponían respecto a otros productos financieros.
Respecto al tratamiento fiscal de los planes de pensiones, la comisión propone que no se aplique ningún límite cuantitativo para las contribuciones empresariales a las mutualidades de previsión social y planes de pensiones modalidad empleo cuando los compromisos se deriven de convenios colectivos.
Si bien la eliminación del límite cuantitativo debe valorarse favorablemente, su implementación práctica puede resultar bastante limitada, puesto que requiere que se haya pactado previamente en convenio colectivo. Tampoco se llega a comprender esta discriminación respecto a las aportaciones a planes de pensiones individuales, que continuarán limitados respecto a sus aportaciones.
Por otra parte, la comisión recomienda establecer una reducción del 20% aplicable a las prestaciones derivadas de planes de pensiones que se perciban en forma de renta. Entendemos que dicha reducción no es lo suficientemente atractiva para que los contribuyentes opten por la percepción en forma de renta de las prestaciones de los planes de pensiones. Finalmente también se echa en falta que la comisión no haya realizado ninguna propuesta en relación al régimen transitorio aplicable a las plusvalías generadas por la transmisión de elementos patrimoniales adquiridos con anterioridad a 31-12-1994.
En cualquier caso deberemos esperar al inicio de la tramitación parlamentaria del proyecto de ley para ver cómo se concretan las recomendaciones planteadas en el Informe de la Comisión de Expertos para la Reforma del IRPF.