Los operadores de móvil gastarán 20 millones de euros en revisar antenas
Todas las antenas de telefonía móvil de las ciudades y de los núcleos de población cercanos -23.000- serán medidas y certificadas de aquí al 30 de junio, dentro de una campaña financiada con veinte millones de euros anuales (3.300 millones de pesetas) por las operadoras Amena, Vodafone y Telefónica Móviles.
En la presentación del Plan Nacional de Certificación de Antenas de Telefonía Móvil, los consejeros delegados de Vodafone, John de Wit, de Amena, Berlarmino García, y de Telefónica Móviles, Javier Aguilera, subrayaron que el objetivo de la iniciativa es transmitir "tranquilidad" a la opinión pública, que "en los últimos meses ha expresado su preocupación" por esta cuestión, afirmó Aguilera.
Los primeros resultados del Plan se conocerán en la segunda quincena de marzo y en la primera quincena de mayo se divulgarán los datos de medición de 23.000 antenas de telefonía móvil, que ascienden a 30.000 si se contabilizan las colocadas en entornos rurales.
Para ejecutar el Plan, las tres operadoras de telefonía móvil han contratado los servicios de 720 profesionales independientes y expertos, que dispondrán de 210 equipos técnicos para realizar sus informes.
Esta documentación se remitirá a los colegios oficiales de ingenieros, encargados de visar (avalar) las certificaciones, para su envío posterior al Ministerio de Ciencia y Tecnología (MCYT), que a su vez hará unas mil certificaciones para chequear y controlar el proceso.
En este contexto, el consejero delegado de Amena resaltó que las mediciones "se realizarán de modo exhaustivo, en todo su perímetro y en todas las distancias, para conocer la densidad de potencia de las antenas en todas las situaciones".
El consejero de Telefónica Móviles admitió que desde junio pasado, la actividad de instalación de antenas "se ha visto afectada por la precaución" de la ciudadanía, que "ha hecho que ninguna de las tres operadoras haya completado el año pasado" sus previsiones.
Precisamente, esto último es la causa de que alrededor de un centenar de antenas de telefonía móvil se encuentren desconectadas, explicó Aguilar, que confió en la puesta en marcha del Plan Nacional de Certificaciones para alcanzar en los próximos meses un nivel de instalación normal.
La iniciativa de las tres operadoras se inscribe dentro del Real Decreto sobre emisiones de radiaciones electromagnéticas, elaborado por el Ministerio de Ciencia y Tecnología y aprobado en septiembre pasado, complementado por una orden ministerial de enero del 2002.
El Real Decreto obliga a las operadoras de telefonía a elaborar certificaciones anuales de sus estaciones de base, cuyo plazo de presentación expira a finales de junio.
Según Aguilera, las compañías del sector respetan "históricamente" las recomendaciones de los estudios científicos, que no determinan una relación de causa efecto entre los campos electromagnéticos y los posibles efectos perjudiciales para la salud del ser humano.
Estas recomendaciones son recogidas por dicho Real Decreto del Ministerio de Ciencia, que establece unos determinados límites de densidad de potencia de las antenas, "unos niveles reforzados después por la orden ministerial de enero".
Por último, el consejero delegado de Amena explicó que en primer lugar se avanzarán los resultados de las comunidades autónomas en donde se ha detectado una "mayor sensibilidad" por la telefonía móvil, como es el caso de Castilla y León y Castilla-La Mancha.