Gonzalez abre una nueva etapa del banco marcada por la rentabilidad y la apuesta por Europa

La Junta de Accionistas del Banco Bilbao Vizcaya Argentaria (BBVA) se celebró en el Palacio Euskalduna de Bilbao con la representación del 55,54% del capital social, en la que se aprobaron las cuentas del 2001 y la reducción del consejo de administración.

El presidente del banco, Francisco González, certificó el inicio de una nueva etapa tras el cierre definitivo de la fusión, que estará orientada al crecimiento rentable y que no perderá de vista a Europa, donde surgirán grandes oportunidades de concentración y donde "queremos ser protagonistas activos".

González, que compareció por primera vez ante la Junta General de Accionistas del banco como presidente único de la entidad, tras la marcha de Emilio Ybarra el pasado diciembre, dijo que el BBVA tiene "ambiciones" en Europa y advirtió que "seguiremos atentos a lo que ocurra y aprovecharemos las oportunidades que surjan y tengan sentido económico y estratégico".

González aseguró que sólo los mejores serán los que puedan tomar la iniciativa y ocupar puestos de privilegio, lo que exige, entre otras cosas, profundizar en el cambio tecnológico, y dotarse de una organización más flexible, suficientemente descentralizada como para actuar con rapidez.

En este sentido, el presidente del banco justificó la reducción del Consejo de Administración de 32 a 21 miembros -serán 20 en apenas un mes con la jubilación de Plácido Arango- y la configuración del nuevo equipo directivo, al frente del cual estará el nuevo consejero delegado, José Ignacio Goirigolzarri.

Sobre Latinoamérica dijo que la región está atravesando una coyuntura difícil, sin embargo señaló que la esperada mejora del entorno internacional y la resistencia al contagio que ha mostrado la región, dan motivos para un razonable optimismo.

No obstante, advirtió que "pueden darse circunstancias extremas que nos lleven a reconsiderar determinadas decisiones anteriores de inversión", pese a que "el compromiso del BBVA con Latinoamérica es estable y de largo plazo, basado en nuestra confianza en el potencial de la zona".

En este punto, González abandonó su discurso e hizo una mención especial a la situación de Argentina para calificar de "injusticia" lo que allí se dice de los bancos españoles, "nos llaman ladrones y no es justo, somos también víctimas de la situación".

Se refirió también al cierre definitivo de la fusión de BBV y Argentaria durante el 2001, que calificó de "modélico", y definió los resultados del ejercicio como "brillantes" en un año adverso, en el que sólo se incrementaron en un 5,9 por ciento respecto al 2000, hasta los 2.363 millones de euros.

González pide "tolerancia cero" frente a ETA

 

 

Francisco González, aseguró que el "brutal ataque terrorista" del 11 de septiembre en Estados Unidos puso de manifiesto que el terrorismo es "un problema de primera magnitud para todos" en el que "todos los países estamos implicados en esta lucha".

 

Según González se "ha puesto de manifiesto la gravedad de la amenaza terrorista" y expresó su deseo de que haya servido para general un cambio de percepción "decisivo" a nivel global sobre el reconocimiento de que "el terrorismo, de cualquier signo y en cualquier parte, es un problema de primera magnitud para todos".

 

"Con el terrorismo hay que tener tolerancia cero. Y a todas estas personas que están interrumpiendo este acto democrático -en relación a un intento de interrupción de la junta protagonizado a su inicio por unas 8 personas, que fueron inmediatamente desalojadas- demuestran que no respetan la libertad de los demás", manifestó.

BBVA consiguió 830,5 millones euros en plusvalías en el 2001

 

 

La venta de participaciones en empresas que realizó el año pasado el BBVA le reportó el año pasado unas plusvalías de 803,5 millones de euros, procedentes mayoritariamente de la reducción de su presencia en Telefónica y en Finaxa y de la venta de la aseguradora Axa-Aurora.

 

Así consta en la memoria de la entidad presentada hoy en la Junta de Accionistas celebrada en el Palacio Euskalduna de Bilbao, en la que el BBVA explica que, al tiempo, desembolsó 440,1 millones de euros en aumentar su presencia en empresas que consolidan en sus resultados, como Repsol y Banca Nationale del Lavoro (BNL).

 

El consejero delegado, José Ignacio Goirigolzarri, destacó, además, durante su intervención ante la Junta que al cierre del ejercicio pasado la cartera de empresas de su grupo industrial tenía un valor de mercado de 10.000 millones de euros y unas plusvalías implícitas de 2.600 millones de euros.

 

De las plusvalías conseguidas el ejercicio pasado, la mayor parte provinieron de la reducción de su presencia con carácter permanente en Telefónica hasta el 5,138%, que le reportó unas ganancias de 352,93 millones de euros.

González ratifica que la sede social del BBVA permanecerá en Bilbao

 

 

González afirmó que la sede social del banco permanecerá en Bilbao y aseguró que este asunto está fuera de toda discusión, "queremos estar aquí y estaremos aquí", insistió. González, en respuesta a varios accionistas que le preguntaron por la ubicación de la sede social del banco durante la Junta General celebrada hoy en el Palacio Euskalduna, añadió "estamos encantados de tener la sede social aquí (Bilbao) y no vamos a hacer ningún ejercicio de aventurerismo".

 

"Tenemos muchos colaboradores y muchas raíces en el País Vasco", dijo González para agregar que "no deberían hacerse ejercicios de demagogia", con lo que contestaba a los accionistas y a diversas informaciones periodísticas publicadas en las últimas semanas que apuntaban la posibilidad de un traslado de la sede.