El Parlamento argentino debate la reducción del impuesto del petróleo de un 20 a un 8%
La modificación fue avalada por el Ministerio de Economía, que aceptaría recaudar un poco menos de lo previsto originalmente, pero conseguiría frenar la presión de las empresas petroleras, que rechazan la imposición de un tributo a las exportaciones y amenazan con cortar planes de inversión y aumentar el precio de los combustibles.
Con la propuesta de los gobernadores, el Estado obtendría unos 300 millones de dólares al año, mientras que las previsiones de Economía marcan que el impuesto vigente podría otorgar 350 millones. Los gobernadores de las siete provincias productoras de petróleo consideran que gravar las exportaciones afecta de manera desigual la cadena productiva y que reduce sustancialmente las regalías que cobran esos distritos por los derechos de explotación.
El proyecto que empezó a debatirse en el Parlamento es similar al que proponía el sector empresario, con lo que su aprobación podría poner fin al conflicto entre el Gobierno y las petroleras. Duhalde ratificó hoy, en declaraciones a Radio Nacional, que las empresas deberán pagar el impuesto a las exportaciones, pero admitió que podría haber modificaciones. "Lo que el Estado nacional está exigiendo a todo el sector del petróleo es un ingreso, estimado en 650 millones de pesos por año (unos 300 millones de dólares). Nos es indiferente si lo gravamos como exportación o lo gravamos dentro del proceso productivo", aseguró.
Petición de los gobernadores
En el Parlamento, el gobernador de Salta (norte), Juan Carlos Romero (peronista), defendió la letra del proyecto de modificación: "Con este proyecto, se consigue mayor equidad, el Estado recauda casi lo mismo y se garantiza la continuidad de los programas de inversión y de investigación de las empresas internacionales".
Jorge Sosbich, gobernador de Neuquén (sur), que produce el 33% del petróleo argentino, destacó la necesidad de que el proyecto sea aprobado "de forma urgente" para aliviar la tensión con las compañías, "que pone en peligro miles de puestos de trabajo".
Los gobernadores se reunieron por la mañana con los diputados y los senadores que integran la Comisión de Energía del Parlamento y se llevaron la promesa de que el debate del proyecto comenzará la próxima semana. Fuentes del Ministerio de Economía ratificaron que el impuesto a las exportaciones regirá mientras no haya otro que lo reemplace.
La hispano-argentina Repsol-YPF, líder del sector exportador en el país austral, sería la principal beneficiada si se cambiara el impuesto, ya que actualmente asume el mayor peso del tributo. Al generalizarse a todo el proceso de producción, cada empresa pagaría de acuerdo con la cantidad de crudo que extraiga.