El Gobierno y Microsoft defienden su arreglo ante un tribunal
El Departamento de Justicia de EEUU y los abogados de Microsoft instaron hoy a una juez federal Colleeen Kollar Kotelly a que acepte el acuerdo entre el Gobierno de EE UU y la empresa respecto a las querellas por prácticas monopolísticas.
Durante las primeras horas de una audiencia que podría continuar mañana, jueves, Kollar Kotelly hizo preguntas respecto a un pacto con el que están de acuerdo además nueve estados, pero que no aceptan los otros nueve que también demandaron a Microsoft en 1997. El abogado Phil Beck, del Departamento de Justicia, dijo al tribunal que los críticos del acuerdo han pedido sanciones que no tienen sustento en el dictamen de un tribunal de apelaciones que el año pasado invalidó la división de Microsoft, pero la condenó por prácticas desleales.
La firma de Bill Gates produce el programa Windows con el que opera casi el 95% de los ordenadores en todo el mundo. Los demandantes -estados y empresas productoras de programas de computadora- afirmaron que para mantener y ampliar su hegemonía, Microsoft presionó a los fabricantes de ordenadores.
En julio de 2000, un juez federal condenó a Microsoft por prácticas desleales en la competencia con las otras firmas y ordenó que la firma se dividiera en dos, una dedicada a Windows y otra a las aplicaciones que ahora se venden vinculadas a él.
Once meses después, un tribunal de apelaciones invalidó partes de ese dictamen, separó al juez del caso y marcó pautas según las cuales se dictarían los remedios a los daños causados por Microsoft, o se establecería que hubo prácticas monopolísticas que requerirían una división de la empresa.
Aunque está lejos de verse el final de esta prolongada batalla legal, el Gobierno federal, los nueve estados que se han sumado al acuerdo y Microsoft esperan que esta audiencia convenza a la juez Kollar Kotelly para que apruebe el arreglo propuesto.
Este pacto incluye algunas disposiciones que darán a los fabricantes de computadoras más libertad para la incorporación de programas de ordenadores rivales de los de Windows en la configuración inicial con la que los aparatos se venden a los usuarios.
También requiere que Windows revele algunos aspectos internos de su sistema operativo a sus rivales en la industria informática. Aparte de las presentaciones que harán los abogados de Microsoft, la juez Kollar Kotelly asignó una hora para el testimonio de los críticos de Microsoft que se oponen a este arreglo.
La semana próxima, el tribunal de Kollar Kotelly realizará audiencias separadas sobre las medidas de sanción más severas que han pedido otros nueve estados que consideran que el arreglo propuesto no va tan lejos como se cree necesario.
Microsoft y el Departamento de Justicia anunciaron la pasada semana varios cambios al acuerdo propuesto, que, según indicaron, atienden a las críticas del público de lo que se percibe como rutas para evitar compromisos del pacto original.
Los estados que no aceptan el arreglo propuesto sostienen que sus disposiciones dejan demasiadas vías de escape, y permitiría que Windows continúe abusando ilegalmente de su monopolio de Windows.