Iberia, Lar y MRW brillan por su solidaridad
La Fundación Empresa y Sociedad entregó ayer los premios a las tres compañías españolas que se han convertido en referente de la responsabilidad ética por el rigor de sus programas de acción social.
Felipe de Borbón, príncipe de Asturias, entregó ayer, en un acto solemne celebrado en Madrid, las placas conmemorativas de la primera edición de los premios de la Fundación Empresa y Sociedad a 'las mejores acciones sociales' de compañías españolas. Los galardones se otorgaron bajo tres modalidades: mejor acción social corporativa, que ha distinguido al grupo inmobiliario Lar; área de productos y servicios, que correspondió a la empresa de transporte urgente MRW, y colaboración con los empleados, que recayó en Iberia.
La iniciativa de premiar el compromiso ético excelente de las empresas cuenta con el patrocinio de los tres diarios económicos de ámbito nacional, La Gaceta de los Negocios, Expansión y Cinco Días.
Al acto asistieron más de 200 personalidades de diversas esferas empresariales, culturales y sociales. Entre ellas, Rafael Arias-Salgado, presidente de Carrefour; Luis Lezama, consejero delegado del BBVA; Emilio Saracho, presidente de JP Morgan Stanley; Concepción Dancausa, secretaria general de Asuntos Sociales; Rafael Beneyto, director general de Ayuda en Acción; o Cecilia Plañiol, presidenta de la Sociedad Española contra el Cáncer.
Esta última asociación es una de las ocho organizaciones no gubernamentales (ONG) benefactoras del 'plan de acción social' que el comité de dirección de Inversiones Inmobiliarias Lar definió formalmente en abril de 2001, después de cuatro años de trabajo. Felipe Pereda, presidente del grupo Lar, insistió ayer en que, desde el principio, 'la intención del plan fue clara, no se trataba de un elemento de marketing'. En 2001 destinó 93.772 euros (15,6 millones de pesetas) a los proyectos de colaboración con estos organismos. En 2000, su facturación fue de 151 millones de euros.
El presidente de Iberia, Xabier de Irala, rindió un sentido homenaje al esfuerzo de los más de 25.000 trabajadores de la compañía para conseguir que Mano a Mano, la ONG que fundaron un grupo de empleados en 1994, se haya convertido en 'un gran proyecto' de entrega de ayuda humanitaria, aprovechando los espacios libres de las bodegas de los aviones. Iberia contribuye, además, con la inversión en campañas de ayuda al desarrollo en América Latina y Guinea Ecuatorial, que en 2000 se cifraron en 211.405 euros, sobre una facturación de 4.099 millones.
MRW decidió en 1993 prestar sus servicios a las entidades no lucrativas con un descuento del 66. Ello le supuso en 2000 un coste cesante de 5,3 millones de euros, el 1,8% de su facturación anual. El director general de MRW, Francisco Martín Frías, afirmó: 'Nuestro mayor estímulo será que otras empresas nos tomen como referente'.