Imprimir con diseño y color
Estas máquinas abandonan, al igual que los ordenadores, el aburrido uniforme gris plomo para abrazar diseños atrevidos y toques coloristas
La revolución del diseño también ha entrado en el mundo de las impresoras. Unas impresoras que, en pleno siglo XXI, siguen confirmando el valor del papel. Desde su nacimiento, estos equipos se han adaptado a las necesidades de sus usuarios. Han aumentado valores como la resolución o la velocidad de impresión a la vez que reducían su tamaño y precio. En los últimos tiempos, además, algunas están mutando hacia otras formas distintas de las convencionales para adaptarse mejor a cada entorno.
En tiendas especializadas comparten estantería, máquinas de inyección de tinta, con equipos láser, matriciales o de sublimación. Tecnologías distintas pensadas para distintas aplicaciones. Entre todas estas impresoras, hemos seleccionado seis que, además de cumplir religiosamente con sus funciones, muestran la nueva cara de la informática. Algunas son capaces de imprimir con calidad casi fotográfica. Otras ocupan el mínimo espacio en la mesa de la oficina o proponen un precio imbatible por cada copia impresa. Pero todas mantienen un denominador común: han abandonado el aburrido uniforme gris plomo para abrazar diseños atrevidos y toques coloristas.
Combinando formas redondeadas y transparencias, la Epson Stylus C80 aglutina valores de primer orden como resolución y velocidad de impresión. Una máquina de inyección de tinta pensada para aficionados domésticos que imprimen poco, pero buscan calidad de imagen. Uno de los principales atractivos de esta máquina es que emplea varios cartuchos para imprimir el color (magenta, cyan y amarillo). El objetivo es no tener que sustituir un único cartucho con todos los colores cuando sólo se ha agotado la parte de amarillo, por ejemplo. Como curiosidad, la máquina incluye el programa PhotoEnhance 4, que optimiza la calidad de las imágenes en baja resolución colgadas en la Red.
La i3 de Lexmark es la primera impresora compatible tanto con los ordenadores como con las imágenes de televisión. Pensando en esta última función tiene una forma cuadrada y color negro. Así no desentona al colocarla cerca del vídeo y el televisor. Además, un diseño que combina perfectamente en determinados ambientes informáticos de alto diseño. Por ejemplo, junto a uno de los últimos monitores de cristal líquido oscuros que está lanzando Sony, Philips o IBM.
Para facilitar de uso de esta impresora, todos los controles y la bandeja de papel están en el frontal de la máquina. Emplea la tecnología de inyección de tinta con una resolución excepcional (hasta 2.400 x 1.200 puntos por pulgada) y una rapidez aceptable. De momento, la i3 no funciona con los operadores actuales de televisión digital españoles (es compatible con los sistemas MSTV, PowerTV y Linux), pero, como ya se ha indicado, puede conectarse a cualquier PC vía USB (Universal Serial Bus) y está preparado para Windows XP.
Con aspecto sinuoso y sofisticado, la máquina de Hewlett-Packard es capaz de imprimir directamente desde las tarjetas de memoria que usan casi todas las cámaras digitales (CompactFlash, SmartMedia y MemoryStick). También incorpora una pantalla en color de seis centímetros. Con este sistema ya no hace falta que las imágenes pasen por el ordenador. Manejando sus teclas de control, se pueden crear bordes, pasar las fotos de color a blanco y negro o modificar el tamaño de impresión. Lógicamente, la Photosmart también se puede conectar a un ordenador. Un invento práctico para los aficionados a la fotografía digital. Su mayor inconveniente es el precio de los cartuchos, algo que afecta a casi todas las impresoras de inyección.
La Canon CP10 también mantiene una estrecha relación con el mundo de la fotografía. Puede conectarse a varias cámaras digitales de la firma (familias Ixus y Powershot) para imprimir fotos por sublimación en un papel especial del tamaño de una tarjeta de crédito. Tiene un diseño atractivo y compacto (mide 108 x 125 x 47 milímetros y pesa 510 gramos. Un equipo casi de bolsillo con dos inconvenientes serios: de momento, no se puede conectar al PC y sólo es compatible con algunas cámaras de Canon.
También con un aspecto moderno y futurista, la Webprinter de Olivetti se presenta como el complemento directo de otro equipo de la firma: un teléfono con conexión a Internet y capaz de gestionar correos electrónicos. La Webprinter puede conectarse a este teléfono para imprimir cualquier correo o una página web. Lleva conexión USB y es compatible con el sistema operativo Windows CE. Una impresora de inyección con un precio muy ajustado que funciona con un solo cartucho.
La Okipage 8w Lite llama la atención por su tamaño y su carcasa semitransparente en colores índigo o grafito. Su diseño y ajustadas dimensiones la convierten en una opción para oficinas con problema de espacio. Emplea tecnología láser monocromo. Una opción competitiva y económica por su precio de venta (339 euros) y de mantenimiento (la tecnología láser reduce casi un 50 % el precio por página impresa).