El Supremo aprecia indicios de cohecho en el psiquiatra de El Negro
El juez del Tribunal Supremo Julián Sánchez Melgar dictó ayer un auto en el que aprecia indicios de un delito de cohecho en el psiquiatra de la cárcel madrileña de Valdemoro, Ángel Hebrero, autor del informe que permitió la excarcelación del narcotraficante fugado Carlos Ruiz Santamaría, alias El Negro.
El juez ha llegado a esta conclusión después de descubrir en sus cuentas bancarias ingresos que considera no justificados por valor de unos seis millones de pesetas, así como operaciones sospechosas de cambio de moneda, informa Europa Press.
En el auto, Sánchez Melgar, que instruye la querella por prevaricación contra los tres jueces de la Sección Cuarta de la Audiencia Nacional, que excarcelaron a El Negro, decreta la libertad provisional de Hebrero aunque le impone, como medida cautelar, la obligación de comparecer tres veces al mes. El magistrado acuerda, además, el bloqueo de las cuentas bancarias, salvo el dinero que precise para sus gastos de subsistencia. El juez dictó el auto tras tomar declaración al facultativo y no quedar convencido de sus explicaciones sobre el origen de los ingresos atípicos en sus cuentas. Asimismo, acordó el registro de dos domicilios del psiquiatra en Madrid, donde la Policía se ha incautado de divisas, cuya existencia ha justificado el médico señalando que era dinero que le había sobrado de viajes fuera de España.
La investigación se inició cuando el instructor y el fiscal recibieron una denuncia anónima de un preso de Valdemoro, que aseguraba haber sido compañero de celda de El Negro. El recluso señalaba que Ruiz Santamaría repartió 2,3 millones de euros (382 millones de pesetas) entre el psiquiatra y el presidente de la Sección Cuarta de la Audiencia Nacional, Carlos Cezón.
Por lo demás, la Comisión Disciplinaria del Consejo del Poder Judicial acordó suspender cautelarmente por seis meses a los tres jueces de la Sección Cuarta, Carlos Cezón, Carlos Ollero y Juan José López Ortega, al apreciar indicios de que cometieron una falta muy grave.