Las rentas bajas tendrán más ayudas para acceder a planes de pensiones
El ministro de Trabajo, Juan Carlos Aparicio, anunció ayer que el Ministerio de Economía está preparando, dentro de la nueva reforma fiscal, nuevas ayudas fiscales a los planes colectivos de pensiones -aquellos que se suscriben en el seno de las empresas-, destinadas a las familias con rentas más bajas.
Aunque no cuantificó dichos incentivos fiscales, insistió en que las nuevas ventajas fiscales están orientadas a que 'las familias más pobres puedan hacerse también un plan privado de pensiones'. El Gobierno pretende además fomentar este tipo de planes en las 'microempresas' -donde apenas están presentes-, a través de los planes asociados.
Desde el Ministerio de Hacienda se rechazó ayer cualquier comentario sobre las declaraciones de Aparicio, asegurando que aún no hay ninguna decisión adoptada, a la espera de que la comisión de expertos para la reforma del IRPF, presidida por Manuel Lagares, presente sus conclusiones.
El Gobierno ha incentivado en los últimos años los planes privados como sistema complementario a la Seguridad Social. Las últimas mejoras las ha introducido en los Presupuestos de 2002. Entre ellas destaca la supresión del límite conjunto a los planes individuales y los de empleo. Gracias a ello, una persona puede percibir de su empresa aportaciones a un plan de empleo, con límite de 7.212,15 euros (1,2 millones de pesetas) por año y, simultáneamente, realizar aportaciones a un plan individual, con el mismo límite. Ello supone en la práctica duplicar las aportaciones que dan derecho a deducción anual en el IRPF con respecto a las permitidas antes de enero de este año. Los mayores de 52 años pueden aumentar este límite a razón de 1.202,02 euros (200.000 pesetas) por cada año que supere esta edad hasta 65 años.
Por tanto, quien tenga 65 años o más podría llegar a aportar un máximo de 45.676,92 euros (7,6 millones de pesetas); 22.838,46 euros por contribuciones empresariales, y otros 22.832,46 euros por aportaciones suyas como trabajador.
Además, ha desaparecido el límite porcentual del 25% de los rendimientos de trabajo (40% para mayores de 52 años) para quien realice aportaciones a planes de pensiones. Las empresas tienen derecho a una deducción del 10% del dinero que coloquen en planes para sus trabajadores. En el momento del rescate de los planes, Hacienda permite una reducción del 40% si el cobro se efectúa en forma de capital (de una sola vez). Está pendiente la reforma si el rescate se realiza en forma de renta periódica.