Los nuevos embajadores del §Made in Spain§
Raúl Peralba resalta el papel que desempeñan las instituciones del Estado, empresas, marcas renombradas y referentes de la sociedad civil como embajadores de la marca España
En este mundo que se ha internacionalizado en todo y, especialmente, en lo económico, las empresas van de país en país ofreciendo sus productos y servicios con sus propias habilidades y características; pero con una señal indeleble que influye en sus esfuerzos, el Made in.... Cada país debe construir su Made in... de acuerdo a sus propias circunstancias y al espacio que le dejan sus competidores.
En este proceso hay varios aspectos que influyen y hay uno en especial al que, tal vez, no se le presta la atención debida. Es la labor de los que Miguel Otero (director de Chupa Chups y secretario del Foro de Marcas Renombradas) ha dado en llamar los ¢embajadores de la marca España¢.
La forma de ser, las actitudes, los comentarios de quienes representan a un colectivo determinado son los que crean, mantienen o modifican la imagen de ese colectivo. Así pues en el caso del Made in Spain los españoles que, de alguna manera, trascienden en el ámbito internacional son sus embajadores. Se pueden citar tres grupos: las instituciones del Estado, las empresas y marcas renombradas y los referentes de la sociedad civil.
En primer lugar conviene hablar del papel del Estado. Si en política interna son las fuerzas de la oferta y la demanda las que asignan recursos y fijan precios, dentro de un orden, en la actividad internacional de las empresas de un país, también el Estado debe ser solo un catalizador. Un elemento que, sin intervenir directamente, promueva y facilite la acción.
La promoción en el entorno empresarial es la actividad que tiene por objeto estimular el emprendimiento de nuevos proyectos, intentando maximizar la eficacia de los esfuerzos que contribuyan a la creación de riqueza. Y de la propia descripción surgen claramente los participantes en el plan de promoción:
Emprendedores: son los empresarios, en este caso, con vocación de ser internacional. Si no hay emprendedores no habrá proyecto; son insustituibles.
Promotor: es el responsable de canalizar y maximizar la eficacia de la energía aportada por los emprendedores. Tiene la capacidad, y debe utilizarla, de crear las condiciones y de que se lleven a cabo nuevos proyectos, en este caso de internacionalización.
Clima: es el entorno, que debe ser favorable para que se incentive la creación de nuevos emprendimientos y llevarlos a cabo, teniendo en cuenta las variables que les condicionan.
Es evidente que los promotores sólo pueden ser las empresas. Ahora bien, en la denominada nueva economía la explosión de medios de comunicación ha dado un papel protagonista a los que se conocen como referentes de la sociedad civil. En este grupo se deben incluir aquellos individuos cuya actuación y / u opinión personal puede influir en la imagen del país.
Primero son las personas destacadas individualmente; los políticos y los funcionarios, los profesionales o expertos de reconocimiento internacional, los artistas y sus producciones, los deportistas y sus logros y actitudes después de los resultados. También los responsables de organizaciones no empresariales; medios de comunicación, universidades, escuelas de negocios, ONG, etc.
Finalmente, son embajadores los ciudadanos. Su actitud y opinión con relación al propio país puede tener un efecto multiplicador que aportará un valor añadido enorme si son positivas. Al mismo tiempo una actitud y opinión negativas sobre lo propio causan un daño que puede ser irreparable. Por eso cualquier plan de mejora del Made in Spain debería comenzar por convencer a todos que España es un gran país, la décima potencia mundial.
En esto sí que puede influir el Estado. Hacen falta ciudadanos motivados que promocionen la marca España convencidos de que su influencia es determinante. Para ser más internacionales conviene que empecemos por aquí.