Francia consolida la recuperación de la natalidad
La política francesa de fomento de la natalidad continúa dando sus frutos. Francia registró en 2001 un total de 774.800 nacimientos, lo que sitúa la tasa en 1,9 hijos por mujer, frente a los 1,88 de 2000 y 1,73 de hace cinco años. Con estas cifras, Francia registra por segundo año consecutivo un aumento de los nacimientos que no se producía desde hace 20 años.
En opinión de los sociólogos, este baby boom se produce gracias a las medidas puestas en marcha hace unos años por el Gobierno, cuyo principal objetivo era ofrecer a las madres trabajadoras facilidades para poder conciliar la vida profesional con la maternidad. Por su parte, la ministra delegada de la Familia, Segolene Royal, indicó ayer que los datos muestran la 'confianza en el futuro de los franceses'.
Según los datos hechos públicos ayer por el Instituto Nacional de Estadística (Insee), la edad media de la maternidad en Francia se ha mantenido estable por tercer año consecutivo, situándose en los 29,4 años. El Insee puso también de manifiesto que en 2001 los nacimientos fueron más numerosos en edades extremas (antes de los 25 años y más de 35, incluso más de 40) que los contabilizados en 2000. En el 15% de los nacimientos de 2001 la madre tenía más de 35 años, frente a una sensible disminución de la maternidad entre los 25 y 29 años de edad.
El alza de la natalidad y el descenso de las defunciones llevó el año pasado a Francia a registrar 61,1 millones de habitantes, 300.000 más que en el ejercicio de 2000. Estas cifras colocan a Francia después de Alemania (con 82,4 millones de habitantes) y antes del Reino Unido (60,1 millones) en la clasificación de los países más poblados de la UE.
Matrimonios y divorcios
El Insee explicó que parte de la caída de la mortalidad (528.000 frente a 536.300 en 2000) se debe a la menor virulencia de la gripe. Además la esperanza de vida progresó 3,5 meses en 2001 y se situó en 75,5 años para los hombres y en 83 para las mujeres, lo que sitúa a Francia al frente de la UE, donde la media es de 74,9 años para los varones y 81,2 para las mujeres.
En su estudio, Estadística destacó también que, por segundo año consecutivo, el número de matrimonios superó los 300.000 (303.500), pese al Pacto Civil de Solidaridad, que por el momento se desconoce si es más una alternativa a la unión tradicional o una forma de legalizar las relaciones homosexuales. Los primeros matrimonios cada vez tienen lugar más tarde, a los 28 años de media en la mujer y a los 30 años el hombre, a la vez que aumenta el número de segundas nupcias.
La cifra de divorcios se mantiene estable en unos 110.000 por año, produciéndose la mayoría de las crisis a los cinco años de matrimonio, informa Efe. Sin embargo, la actividad económica del país apunta hacia el pesimismo: de un crecimiento del PIB del 3,5% en 2000, se pasó el año pasado a una expansión del 2,2%. Los analistas pronostican que el crecimiento apenas alcanzará el 1,1% durante el presente ejercicio. La proyección oficial del Gobierno es del 2,25%, pero el ministro de Finanzas, Laurent Fabius, reconoció ayer que el Ejecutivo podría revisar a la baja sus previsiones económicas para 2002.
No obstante, todas las previsiones apuntan a que a pesar de los síntomas de desaceleración mundial, si se confirma la incipiente recuperación de la economía de EE UU y si la locomotora alemana inicia la mejora de su actividad, los datos del producto interior bruto francés del segundo semestre de este año registrarán un sensible aumento, hasta tal punto que podría permitir a Francia crecer un 2,5% en 2003.
Blair reforma el mercado de pensiones
El Gobierno británico intenta hacer atractivos los planes de pensiones basados en la inversión en bonos del Tesoro.
La Administración rechazó ayer la petición de los consumidores de derogar la ley que obliga a los jubilados a invertir a partir de los 75 años en estos fondos. A cambio, el ministro de Trabajo, Alistair Darling, prometió reformar este mercado de bonos, que actualmente tiene un valor de 8.600 millones de dólares (unos 10.000 millones de euros). 'La reforma es necesaria para que los consumidores estén mejor informados y puedan escoger la cartera de inversión más rentable', afirmó Darling.
El Gobierno estudia ampliar la variedad de bonos en los que los clientes pueden invertir, ya que ahora es muy limitada. Por ejemplo, no se permite la inversión en bonos a corto plazo.
Consumidores y oposición acusan al Ejecutivo liderado por Tony Blair de obligar a invertir en unos fondos que generan un escaso rendimiento. La Administración ha dado de plazo hasta el 5 de abril para recibir sugerencias para reformar el mercado de pensiones.