El Parlamento turco decide mantener sin cambios la ley de reforma bancaria
El Gobierno turco ha decidido rechazar la propuesta del presidente del país, Ahmet Necdet Sezer, de modificar la ley de reforma bancaria, clave para acceder a nuevos préstamos del Fondo Monetario Internacional (FMI).
El Parlamento aprobará el miércoles la ley sin incluir ninguna de las modificaciones propuestas por Sezer. La Constitución obliga al presidente a aprobar la norma cuando el Parlamento la aprueba por seguna vez.
El presidente rechazó el pasado viernes tres artículos de la ley porque, en su opinión, violaban la Constitución. La decisión repercutió en la cotización de la lira, que se depreció inmediatamente. El temor de los inversores era que el veto presidencial retrasase la reunión del FMI, prevista para el viernes y en la que se espera que Turquía reciba un nuevo crédito de 12.000 millones de dólares (13.950 millones de euros).
Sezer vetó los capítulos que prevén el mismo status legal para los administradores de los bancos públicos y privados, impiden que los reguladores bancarios sean perseguidos por la Administración turca y eliminan la categoría de funcionarios para algunos empleados del sistema financiero público.
La reforma está destinada a reforzar el debilitado sistema bancario turco, duramente golpeado por la crisis del año pasado que provocó una fuga masiva de divisas y hundió la cotización de la lira.
Entre otras cosas, la ley autoriza al Gobierno a inyectar 4.000 millones de dólares (4.650 millones de euros) en el sistema financiero para estimular los préstamos e inversiones que revitalicen una economía en crisis. El Ejecutivo proveerá de bonos o de dinero a los bancos cuyas acciones se hayan deteriorado por la depreciación de la lira.
La economía se contrajo en 2001 un 9%, el peor resultado desde 1945. Los pagos de la deuda representan el 90% del PIB, por lo que los créditos del FMI son esenciales para que el país no entre en suspensión de pagos. Turquía está implantando las reformas exigidas por el Fondo en un programa económico de 19.000 millones de dólares (22.090 millones de euros).