'Habrá ayudas agrarias siempre, pero hay que elevar el presupuesto'
El presidente de la Asociación de Jóvenes Agricultores y vicepresidente de la CEOE apuesta por que se mantengan las ayudas comunitarias a la agricultura española incluso después de la ampliación, pero elevando el presupuesto. 'Ningún modelo agrícola se mantiene en España sin ayudas'
El presidente de Asociación de Jóvenes Agricultores (Asaja), Pedro Barato (Calzada de Calatrava, Ciudad Real, 42 años), estima que el sector agrario debe tener siempre ayudas de la Unión Europea, incluso después de la ampliación hacia el Este, porque no hay posibilidad de vivir sin subvenciones salvo para cultivos muy concretos. Pero asegura que para ello habrá que elevar el presupuesto. Barato, vicepresidente de la CEOE, se muestra escéptico ante el papel de la presidencia española de la UE en el sector agrario.
Pregunta. ¿Cree que el Gobierno español tiene capacidad de maniobra, durante la presidencia europea, para abordar grandes cambios en materia agraria?
Respuesta. Capacidad tiene, pero en el orden del día no está. Aunque no haga grandes reformas, si quiere podrá ir cerrando temas que ya están abiertos. Es el caso de la organización del mercado de los frutos secos, la del plátano, el arroz y las proteínas vegetales. En materia ganadera, está demostrado que se puede incrementar la retirada del espinazo hasta los 20 meses. Pero, sobre todo, y esto sí que no está en los planes del Gobierno, está el debate sobre la PAC antes de 2006.
P. A propósito de este futuro, ¿considera que se puede mantener el sistema actual de ayudas o hay señales que apuntan a una paulatina desprotección?
R. Las ayudas van a estar ahí, y otra cosa es que el mecanismo para recibir las ayudas sea distinto. Segurísimo que el proteccionismo se va a mantener, incluso tras la ampliación de la Unión Europea a los países del Este.
P. ¿Pero cree que se va a seguir destinado la mitad del presupuesto comunitario a la agricultura?
R. El quid de la cuestión es qué cantidad: el 50% de lo presupuestado como ahora o de lo que no está presupuestado El presupuesto siempre se puede ampliar. Las ayudas pueden venir de otra forma, pero ayudas en el sector agrario siempre va a haber. Y no tienen por qué reducirse.
Aquí lo que está claro es que hasta 2006 el sistema se va a mantener como está. A partir de ahí, nadie tiene la bola de cristal. Se está debatiendo con mucho secretismo y tal vez el modelo haya que cambiarlo.
P. ¿Qué valor le otorga a la competitividad de la agricultura española? ¿Cree que puede vivir sin ayudas?
R. No hay un solo modelo de agricultura en España que pudiera sobrevivir sin ellas. La cornisa cantábrica sin ayudas muere; la de la España interior sin ayudas no tiene ni para los gastos, y en el litoral, aunque hagan falta menos subvenciones, no significa que haya que quitárselas.
Hay sectores que haciendo las cosas bien, como es el olivar, las frutas y hortalizas, la carne, el vino... pueden competir; pero hay que salvar la asignatura pendiente que todo el campo español tiene que aprobar, que es la comercialización.
P. Otra patata caliente del sector son los cítricos españoles. ¿Nada les hacía sospechar que tanto éxito terminaría provocando una respuesta de los productores americanos, como ha ocurrido con el bloqueo a las clementinas?
R. Me resisto a creer que hemos muerto de nuestro propio éxito. Los lobbies americanos han actuado así con todos los productos, lo que demuestra la debilidad de las instituciones comunitarias ante el gigante americano.
P. ¿Por qué el sector hortofrutícola, el más importante de la agricultura, logra tan escasas simpatías de las Administraciones?
R. El sector de las frutas y hortalizas ha demostrado a lo largo de muchas generaciones que conforma el pilar más dinámico de la agricultura española. Es el que más trabajo genera, el que más divisas aporta, y esto ha hecho pensar al Gobierno español que a lo mejor necesitaba menos ayudas. Además, ha estado siembre abandonado y lo peor de todo es que ha sido utilizado como moneda de cambio para arreglar otros asuntos.
'El consumidor no debe pagar la crisis ganadera'
Pedro Barato arremete contra la decisión del Gobierno de trasladar al consumidor parte del coste de la crisis de las vacas locas. 'Lo tengo que valorar negativamente, porque siempre hemos exigido que lo asumieran las Administraciones públicas', afirma el presidente de Asaja.
El Boletín Oficial del Estado publicó el pasado 19 de enero una orden ministerial que establecía los nuevos sistemas de control de los subproductos cárnicos y el compromiso de la distribución de trasladarlos al consumidor. æpermil;ste pagará entre dos y cuatro céntimos más por kilo de carne.
Por otro lado, la Confederación de Cooperativas Agrarias de España (CCAE) ha solicitado al Servicio de Defensa de la Competencia una reunión para iniciar los trámites que lleven a la presentación de una denuncia contra Confecarne. Las cooperativas no están dispuestas a tolerar la actitud unilateral de Confecarne, 'que ha fomentado acuerdos entre sus industrias y mataderos a efectos de cobrar exclusivamente al ganadero los costes derivados de la eliminación de las harinas cárnicas'.
Según CCAE, a pesar de la existencia de una orden ministerial, Confecarne ha mantenido su actitud 'alterando el mercado cárnico nacional', por lo que 'defenderá los intereses de las cooperativas y emprenderá cuantas acciones legales y políticas sean posibles contra los establecimientos y asociaciones que repercutan los costes de la retirada de las harinas cárnicas exclusivamente al sector ganadero'.