Banesto sortea la desaceleración y cumple su objetivo de beneficio
Banesto consiguió, el año pasado, crecer más que la media del sector, ganar cuota de mercado, mejorar la eficiencia y cumplir su objetivo de resultados. Pese a mostrarse optimista para 2002, en el que apuesta por un aumento del beneficio del 15% al 20% a pesar de un entorno económico desfavorable, el presidente del banco, Alfredo Sáenz, reconoció ayer que 'nos queda todavía mucho' por alcanzar al Banco Popular.
Banesto, que dejará de cotizar en Bolsa en los próximos meses tras la aprobación de la opa de exclusión, consiguió cerrar 2001 con un resultado antes de impuestos de 520,8 millones de euros (86.652 millones de pesetas). Esta cifra implica un crecimiento del 23,1%, muy cerca del objetivo previsto (25%), a pesar de la desaceleración económica y la rebaja de tipos. El beneficio atribuible subió un 11,1%, hasta 421,7 millones de euros (70.168 millones de pesetas), pero este escalón se explica por el fuerte crecimiento del pago de impuestos, finalizado el crédito fiscal del que disfrutaba tras la intervención de la entidad por el Banco de España.
Banesto sostuvo este resultado en una política muy orientada en el recorte de gastos, con reducción de oficinas y plantilla y una progresiva migración de los clientes a los canales de bajo coste.
La plantilla se redujo 1.017 personas en el año, de las que 954 son prejubilaciones, aunque se incorporaron 316 personas. En dos años han salido 1.800 empleados y han entrado 1.000. Además, se ha ajustado mucho la red de oficinas. En 2001 se cerraron 266, con lo que la red se coloca en 1.656 y el ajuste seguirá este año, con el cierre previsto de otras 125, de las que 25 aproximadamente son intercambio con el SCH, la matriz.
Con todo, se mejoró el volumen de negocio por empleado y el volumen de negocio por oficina, ratios en las que se encuentran los primeros del sector, según Sáenz. Pero además del recorte de gastos, Banesto ha conseguido mejorar el volumen de negocio gracias a una segmentación muy clara para mejorar la rentabilidad y vinculación del cliente. El hecho es que se consiguieron crecimientos del balance superiores a la media del sector, lo que les ha permitido ganar cuota de mercado.
La inversión crediticia aumentó un 14,7% y la de depósitos y fondos, un 7,4%, con lo que ha ganado 0,44 puntos de cuota en crédito y 0,33 puntos en depósito. El objetivo, 'irrenunciable en cualquier escenario' en palabras del presidente, es seguir arañando mercado a un ritmo de un punto cada tres años, aunque la importancia del mercado doméstico para los dos mayores grupos (BBVA y SCH), en vista de la situación en Latinoamérica, anticipa un año de mayor competencia.
En cualquier caso, Sáenz se mostró optimista sobre éste año y el 2003, y confió incluso en alcanzar su viejo objetivo de llegar a 781 millones de euros (130.000 millones de pesetas) el año que viene.
Para este ejercicio planteó una horquilla amplia de crecimiento del beneficio, entre el 15% y el 20%, con mejora de tres puntos en la eficiencia, que estará en el 49%, y de un punto en la rentabilidad de los recursos propios, hasta 18,3%.
El año pasado mejoró 3,3 puntos y se situó en 52,1%, todavía muy lejos del Banco Popular, que se situó en el 37,2%. Y es que el Popular sigue siendo el banco en el que Banesto pone el foco de sus aspiraciones, aunque Sáenz reconoció ayer que 'nos queda mucho para alcanzarlo'. En la junta de accionistas del año pasado, Sáenz expresó su deseo de convertir a Banesto en el tercer banco español y arrebatar el puesto al Popular.
Uno de los aspectos más destacables de 2001 es el fuerte aumento del margen de explotación de los clientes (38%), incremento que no se recoge en el margen de explotación global que aparece en la cuenta de resultados por efecto de la inversión en deuda pública.