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Una de cada tres empresas de automóvil admite caída de pedidos

La debilidad de las exportaciones españolas del sector del automóvil durante 2001, con un crecimiento de sólo el 4,6 en el acumulado enero-octubre (2,6 puntos por debajo de la media global), y una caída del 10,8% en el último mes, puede verse agravada a medio plazo si se cumplen las pesimistas previsiones de pedidos exteriores que figuran en la última encuesta de coyuntura de la exportación.

Los resultados de este indicador, elaborado trimestralmente la Secretaría de Estado de Comercio, muestran cómo un 32% de las empresas del sector admitía en octubre un descenso en su cartera de pedidos exteriores para los próximos 12 meses (hasta septiembre de 2002). Otro 31% prefería no pronunciarse sobre la evolución de su demanda de exportación. Un porcentaje inusual por lo elevado, que refleja la incertidumbre existente en el sector y que afecta tanto a los fabricantes como a la industria auxiliar.

Un 34% de las empresas de esta industria muestra expectativas de cartera exterior al alza. Este dato contrasta fuertemente con el 92% de empresas que declaraba una evolución alcista de sus pedidos al término del segundo trimestre del pasado año, fecha en la que el descenso de la cartera afectaba únicamente al 4% de las firmas.

La desaceleración en los mercados de Francia y Alemania, en el caso de los fabricantes de vehículos, y la recesión en EE UU y América Latina en la industria auxiliar son las causas principales de un deterioro que, de confirmarse, se convertiría en una seria amenaza para la evolución de la balanza comercial de España.

El automóvil no sólo es nuestro primer sector exportador, sino que aporta el 22% del total de las ventas españolas en el exterior.

En contraste con la situación del automóvil, el panorama parece que empieza a despejarse para el sector de bienes de equipo, segundo en el ranking exportador español y que aporta el 20,9% de las exportación total.

Un 38% de las empresas de este área declara ya una evolución alcista en sus pedidos para el mercado internacional hasta septiembre de 2002, superando ampliamente el 17% que tenía aumentos de cartera para el último trimestre de 2001. Del resto de las empresas del sector, el 50% apunta expectativas de cartera estable y sólo un 7% señalaba pedidos a la baja.

En el resto de sectores las mejores expectativas de la actividad exportadora se concentran en el de materias primas, con un 87% de las empresas con previsiones de cartera al alza, frente al 63% del trimestre anterior.

La evolución es negativa para todos los demás, destacando el 38% de empresas con pedidos al alza en el sector agroalimentario (59% en la encuesta de julio), mientras que esta mejoría de la cartera exterior afectaba sólo al 31% de las empresas de bienes de consumo y al 26% de las firmas de semimanufacturas.

 

Baja América y suben Asia y Europa del Este

Las expectativas de exportación de las empresas españolas por áreas de destino son un fiel reflejo del panorama económico de cada una de estas regiones en los momentos actuales.

Así, de las empresas que exportan a la Unión Europea (el 97% del total) un 35% declara que sus ventas evolucionarán al alza; un 48%, que permanecerán estables, y un 12% cree que irán a la baja.

Las expectativas de estabilidad predominan en todas las regiones con excepción de América del Norte, donde las expectativas a la baja afectan al 50% de las empresas que venden en ese mercado (el 63% del total), superando incluso al 39% de empresas que empeora sus previsiones en América Latina.

Por contra, las previsiones de mejora de la cartera de pedidos exteriores son mayoritarias entre las empresas que exportan a Europa del Este (43% del total) y Asia (39%).

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