El esfuerzo mediador de Blair no frena la tensión entre India y Pakistán
Los esfuerzos diplomáticos del primer ministro británico, Tony Blair, y del presidente de EE UU, George Bush, son incapaces de frenar la creciente tensión entre India y Pakistán. Los tiroteos en la frontera común de Cachemira se intensificaron ayer mientras los Gobiernos de ambas partes reafirmaban su voluntad de solucionar diplomáticamente la crisis.
Los oficiales paquistaníes informaron ayer de la muerte de una mujer a consecuencia de los disparos de las tropas indias. Por otra parte, 10 soldados paquistaníes murieron al estallar una mina al paso del camión en el que viajaban. Los independentistas musulmanes de Cachemira atacaron ayer a las tropas indias causando la muerte de cuatro soldados e hiriendo a otros siete. La actual tensión estalló el pasado 13 de diciembre, cuando los radicales islámicos atacaron el Parlamento de Nueva Delhi, provocando 14 muertos, entre ellos, los cinco asaltantes.
India acusa a Pakistán de apoyar a los rebeldes de Cachemira y ha exigido la detención de 20 sospechosos. El Gobierno de Islamabad ha reclamado pruebas incriminatorias, una petición calificada de "insultante" por el primer ministro indio, Atal Behari Vajpayee.
El mandatario indio y el presidente paquistaní, Pervez Musharraf, coincidirán hoy en Katmandú en el marco de la cumbre de la Asociación del Sur de Asia para la Cooperación Regional. Pero Vajpayee rechaza reunirse con Musharraf mientras éste no ordene la detención de los radicales islámicos.