El Nasdaq rompe con cinco semanas de avances
La falta de dirección marcó la sesión de ayer en los mercados estadounidenses mientras los inversores trataban de digerir los mensajes contradictorios de los últimos indicadores macroeconómicos. El gran debate en los mercados es si los resultados empresariales justifican los avances recientes en un contexto de desaceleración económica. "La realidad es que los precios actuales y las condiciones de negocio no están ajustadas", señalaba ayer un experto.
La inflación no varió en el mes de noviembre, aunque la subyacente subió un 0,4%, el mayor aumento desde enero de 1996. La producción industrial, por otra parte, descendió un 0,3% en noviembre. El dato, pese a ser mucho mejor de lo esperado, apunta a un importante deterioro en el sector manufacturero.
En este contexto el Nasdaq subió un 0,34% y el Dow Jones el 0,46% tras caer la mayor parte del día. Las alertas sobre beneficios de JDS Uniphase, Lucent, Ciena y Oracle esta semana, sumadas a la fuerte caída de las ventas al por menor, han desatado el temor a que la recuperación económica tarde en llegar.
La Reserva Federal también contribuyó a este sentimiento tras dejar la puerta abierta a nuevos recortes de tipos de interés tras imponer la undécima bajada del precio del dinero.
Bristol Myers subió un 2,04% pese a una alerta sobre beneficios. La eléctrica Calpine (-18%) fue una de las más malparadas ayer, después de que Moody's advirtiera que podría rebajar la calificación crediticia a basura.
El Nasdaq (-3,37%) sufrió la primera caída semanal tras cinco avances, mientras el Dow perdió el 2,37%.