Las cajas de Sevilla, salpicadas por un nuevo escándalo

El conflicto abierto entre la Junta de Andalucía y el PSOE con las cajas de Sevilla vivió ayer un nuevo y oscuro episodio cuando faltan poco más de 48 horas para que se esclarezca quién se hará finalmente con el control de Caja San Fernando y El Monte. Así, con el telón de fondo de las inminentes y decisivas elecciones de impositores en San Fernando, que se celebrarán el sábado, el diario El Mundo publicó ayer que los presidentes de las cajas, Isidoro Beneroso (El Monte) y Juan Manuel López Benjumea (San Fernando), han sido espiados durante meses por un detective privado contratado, supuestamente, por el presidente Manuel Chaves y otros altos cargos del PSOE de Andalucía.

El PSOE negó rotundamente la noticia, calificada de "montaje mafioso", y anunció que emprenderá acciones legales contra el detective Antonio Castellano y los escoltas de López Benjumea. El primero, según el citado periódico, habría confesado que trabajaba a las órdenes del jefe de escolta del presidente de la Junta.

"Montaje mafioso"

La propia entidad admitió ayer en un comunicado que López Benjumea ha sido sometido a vigilancia, que fue detectada y neutralizada por la escolta del presidente de San Fernando. La entidad añade que dio cuenta inmediata a la Delegación del Gobierno en Andalucía "a los efectos oportunos". El PSOE ya ha pedido explicaciones a la Delegación del Gobierno y ha insinuado que el PP puede estar implicado en la denuncia, según la visión socialista. Manuel Chaves aseguró que saldrá a la luz "quién está tras el montaje" y advirtió de que no se "doblegará" ante una "conjura de necios que necesita operaciones mafiosas para atentar contra mí".

El portavoz del PP, Rafael Hernando, calificó de "hecho gravísimo" el espionaje y le pidió a Chaves que dimita si no ofrece "explicaciones inmediatas y creíbles". Los populares andaluces, por su parte, reclamaron la actuación de la fiscalía y la creación de una comisión de investigación.