France Télécom confirma que negocia la fusión de Jazztel y Uni2
Si el lunes era Jazztel, ayer fue France Télécom la que dio un paso al frente para confirmar las negociaciones existentes entre ambas. La operadora francesa fue incluso más allá y destacó que el objetivo de los contactos es la fusión de Jazztel y su filial de telefonía fija en España, Uni2. Lo que no habrá en la transacción es una oferta de compra sobre las acciones de Jazztel, lo que motivó que los títulos se desinflaran ayer un 8,23% tras la fulgurante subida de la víspera.
El objetivo de las negociaciones que mantienen France Télécom y Jazztel es la fusión del operador español con Uni2, según confirmó ayer el ex monopolio francés en nota de prensa. Esta operación permitiría a France Télécom reorganizar su negocio de telefonía fija en España y construir un operador capaz de competir en mejores condiciones con Telefónica y Retevisión.
El activo más importante de Jazztel es su red de acceso local, que suma 2.541 kilómetros, y su equipo gestor. Por el lado de Uni2, la mayor aportación será su cartera de clientes, superior al millón. Y la combinación de ambos daría como resultado una entidad mucho más rentable que las dos en solitario. Jazztel tiene la red, pero le falta una masa crítica de clientes que eleve los márgenes y Uni2 tiene los abonados, pero la necesidad de usar las infraestructuras de Telefónica y pagar por ello le quita casi toda la ganancia.
Las conversaciones "se encuentran en un estadio preliminar", advierte France Télécom, y la integración sólo es "posible". Sin embargo, fuentes cercanas a las negociaciones aseguran que el principal punto de encuentro entre las dos compañías es el sentido "operativo" que tiene la integración y que les permitiría a ambas capear la actual crisis de las telecomunicaciones mundiales y españolas.
Pero si France Télécom ha dejado claro cuál es el objetivo de las conversaciones, también ha descartado que la fórmula para llevarlas a cabo sea la toma de una participación mayoritaria o la formulación de una oferta pública de adquisición sobre los títulos de Jazztel. Esta modalidad presenta dos inconvenientes, el coste y los posibles conflictos con los tenedores de bonos de la operadora española.
La deuda de France Télécom asciende a 10,8 billones de pesetas (64.909,31 millones de euros ) y es una de las más elevadas de los ex monopolios europeos. En este contexto, sus inversores no verían con buenos ojos ningún desembolso adicional en estos momentos. Las conversaciones con Jazztel se producen, precisamente, por la negativa de la empresa francesa a seguir poniendo dinero en un proyecto, Uni2, que no satisface sus aspiraciones. Por otro lado, las estrictas condiciones de las emisiones de bonos de Jazztel obligarían a devolverles el nominal, un precio que ninguna de las dos involucradas está dispuesta a pagar.
En este escenario, Jazztel tendría que negociar con los tenedores de bonos las condiciones de la recompra para evitar tener que pagar el nominal, y ofrecerles acciones, nuevos bonos, efectivo o una combinación de los tres. El resultado es que la negociación no se plantea a dos bandas, Jazztel y France Télécom, sino a tres, porque los bonistas jugarán un papel muy importante en su desenlace.
Con estos precedentes, la fórmula más probable para ejecutar la integración, en caso de que las negociaciones fructifiquen, es una ampliación de capital, por la cual una de las dos empresas, Uni2 o Jazztel, absorba los activos de la segunda. France Télécom terminaría siendo accionista de referencia de la compañía fundada por Martín Varsavsky sin tener que desembolsar una peseta.
Así lo entendieron ayer los inversores y, tras una jornada de infarto, Jazztel cerró con una caída del 8,23%. A pesar de la fulgurante subida de la víspera (se revalorizó un 38,5%), el valor amaneció todavía con ganas de seguir subiendo, hasta que el comunicado de France Télécom invirtió la tendencia. En dos días, Jazztel ha sumado 14.413 millones de pesetas a su capitalización y ayer valía en Bolsa 67.596 millones.