La cobertura de morosos de los bancos llega al máximo histórico del 231%
Los bancos han destinado en los nueve primeros meses más de 457.000 millones de pesetas (2.746 millones de euros) a provisiones para insolvencias, un 72% más que el año anterior. Sólo las matrices dedicaron 188.000 millones de pesetas, el doble que en 2000, principalmente para el fondo estadístico. Con esta cifra alcanzan índices de cobertura de la morosidad superiores al 230%, y eso cuando los niveles de morosidad permanecen en zona de mínimos.
Las entidades financieras españolas han dedicado buena parte de su esfuerzo durante este ejercicio a acumular provisiones para prepararse ante el previsible repunte de la morosidad consecuencia de la crisis económica.
El objetivo es contar con un colchón financiero que sirva para amortiguar el impacto de la prevista desaceleración económica para 2002 y mejorar la situación ante el nuevo entorno.
Aunque todavía no se perciben signos preocupantes de morosidad, bancos y cajas son conscientes de que tienen que extremar al máximo la prudencia en la concesión del crédito para mejorar la calidad del riesgo y salir airosos ante el previsible cambio de tendencia, después de haber logrado tasas mínimas históricas.
Por eso, los mayores grupos, como BBVA o Santander Central Hispano, han preferido sacrificar parte del crecimiento de resultados para este año y hacer fondos anticrisis con los que reforzar la solidez del balance, al margen de los saneamientos exigidos por los organismos reguladores. En el caso del BSCH, el fondo tiene un importe de 750 millones de euros ampliable hasta 1.000 millones de euros a final de año y, en el de BBVA, de 200 millones de euros.
En global, los grupos bancarios consolidados destinaron en los nueve primeros meses a provisiones para insolvencias más de 457.000 millones de pesetas (2.748 millones de euros), lo que supone aumentar este capítulo un 72,3% respecto al año anterior. Este esfuerzo por reforzar la solidez del balance se produce en un momento en el que la tasa de morosidad sigue en zona de mínimos y, de momento, no se perciben signos preocupantes de empeoramiento, a juicio de los técnicos de la Asociación Española de Banca (AEB).
En octubre, la tasa de créditos dudosos de las entidades de depósito sobre la cartera crediticia total se mantenía todavía por debajo del 1%. Incluso marcó un ligero descenso respecto al mes de septiembre, del 0,91% al 0,88%, con un volumen global de 892.161 millones de pesetas (5.362 millones de euros), según el Banco de España, sobre una cartera total crediticia que supera ya los 100,3 billones de pesetas.
Fondo estadístico
Pese a estos niveles todavía bajos, los bancos que operan en España (sólo matrices) han dedicado en los nueve primeros meses del año más de 188.000 millones de pesetas (1.133 millones de euros) a provisiones para insolvencias, casi el doble de lo que destinaron el año anterior (95.000 millones).
La práctica totalidad del crecimiento se debió a las aportaciones para el fondo de cobertura estadística impuesto por el Banco de España en julio de 2000, al que se destinó de enero a septiembre 135.000 millones de pesetas, frente a los 35.000 millones de igual fecha del año anterior. Este fondo ha penalizado considerablemente en los resultados de muchas entidades, fundamentalmente de tamaño mediano y pequeño, pero asegura los mayores índices de cobertura que jamás había tenido el sector financiero.
En el caso de los bancos, la cobertura supera el 231%, es decir, incluso aunque el número de morosos se duplicara, las entidades tendrían provisiones más que sobradas para cubrir los fallidos. Hay entidades, como Bankinter, donde este índice de cobertura supera el 381%.
En BBVA y Santander Central Hispano, a pesar del peso del negocio latinoamericano, región donde la morosidad es mayor, la tasa media de cobertura es del 191% y del 139%, respectivamente, mientras que la cobertura en Latinoamérica llega al 215,4% en el caso del BBVA y al 126,3% en el del Santander, tasas muy superiores a las registradas el año pasado.
En el caso de las cajas de ahorros, datos recientes hablan de un nivel de cobertura medio del 160%. En este sector, las mayores provisiones han sido clave en la caída de los beneficios hasta septiembre e influirán en la previsible caída de los beneficios en el conjunto del año.