La Generalitat impulsa la unión de las patronales de pymes catalanas
El interés del Gobierno catalán en contar con una voz única de las pymes para que éstas puedan ejercer de grupo de presión del empresariado catalán en Madrid ha revitalizado el viejo proyecto de crear una única patronal de pymes catalana. La nueva organización acabaría con la actual dispersión de patronales, pero cada una mantendría su independencia.
La vieja aspiración de reunir en una única patronal todas las py-mes catalanas empieza a tomar cuerpo, esta vez parece que de forma definitiva, tras el impulso que el Gobierno catalán está dando al proyecto.
En las últimas semanas, el consejero jefe, Artur Mas, y el titular de Economía, Francesc Homs, se han reunido con el presidente de la gran patronal catalana Fomento del Trabajo, Joan Rossell, y los responsables de las dos patronales de pymes existen-tes en Cataluña, Josep González (Pimec-Sefes) y Eusebi Cima (Fepime, integrada en Fomento).
De las conversaciones no ha surgido todavía ningún acuerdo concreto, pero se ha recuperado la voluntad de crear una única asociación representativa del sector, que podría empezar a andar "dentro de tres o cuatro meses", según fuentes cercanas al proceso de negociación. La nueva patronal, que podría denominarse Pimec, tendría una relación con Fomento similar a la que mantiene Cepime con la CEOE. Es decir, tanto las organizaciones territoriales que dependen de Fomento como Fepime y Pimec-Sefes mantendrían su independencia.
"De ningún modo se va a producir una fusión que anu-le a estas organizaciones", señalan fuentes de Pi-mec-Sefes.
Esta organización, que agrupa más de 45.000 empre-sas y 340.000 trabajadores, se ha opuesto siempre a los reiterados intentos de fusión con Fomento.
De hecho, su presidente, Josep González, se apresuró a marcar distancias con Fepime cuando, recién creada esta patronal, su responsable, Eusebi Cima, aseguraba que una única organización debía representar a la peque-ña y mediana empresa catalana. Para González, el propio nacimiento de Fepime -a finales del año pasado- fue percibido como un intento de OPA hostil por parte de Fomento.
Grupo de presión
Fepime está constituida por 21 organizaciones empresariales territoriales y 26 sectoriales, todas ellas miembros de Fomento del Trabajo. Representa a 248.000 pymes y autónomos de toda Cataluña. Su presidente dirige también Cecot, la patronal del área de Terrassa (Barcelona), una organización que pese a su reducida implantación territorial, se ha caracterizado por un elevado dinamismo y por ser uno de los interlocutores del Gobierno en materia empresarial. Una de las propuestas más conocidas de Cecot fue la creación del Estatuto de la Microempresa, recogido en diversos programas electorales.
Un papel similar ha ejercido durante los últimos años Pimec-Sefes. Sus iniciativas se recogen anualmente en una publicación que sirve también de base para propuestas programáticas.
La integración de ambas organizaciones permitiría a las pymes catalanas conseguir una mayor proyección y actuar, en la práctica, como un lobby o grupo de presión. Esta necesidad es especialmente acuciante tras las últimas elecciones generales. Hasta entonces, Convergència i Unió actuaba de correa de transmisión, aprovechando que el PP gobernaba en minoría y podía llevar a la práctica las líneas básicas de su programa económico.
Marzo de 2000 marcó una inflexión en esta política y, aunque las patronales catalanas han expuesto directamente en el Congreso sus prioridades en la subcomisión creada para impulsar las microempresas y los autónomos, han perdido las ventajas que supone un interlocutor único con el Gobierno.