Francia no descarta que la explosión de Toulouse fuera un atentado
El ministro francés de Medio Ambiente, Yves Cochet, declaró ayer que no está descartada "en absoluto" la hipótesis de que la explosión de una planta química de Toulouse fuera resultado de un atentado. En la explosión, sucedida el pasado día 21 de septiembre, murieron 29 personas y unas 3.000 personas resultaron heridas.
En un principio se descartó la hipótesis de que la explosión fuese el resultado de una acción terrorista. Pero el diario parisino Le Figaro reveló ayer que la policía había descubierto el cadáver de un hombre de origen tunecino que iba vestido con varias capas de ropa superpuestas "a la manera de los kamilazes islámicos". El informe del forense señala que el hombre llevaba "dos pantalones superpuestos y cuatro prendas interiores, dos calzoncillos y dos camisetas". Según la revista Versus Actuelles, el cadáver ha sido identificado como el de Hasán Jandubi, de 35 años, de nacionalidad francesa y origen tunecino.
Jandubi entró a trabajar en la planta cinco días antes de la explosión y estaba fichado por la policía como presunto traficante de vehículos robados. Algunos diarios franceses afirman que Jandubi era iniciado en el intregrismo islámico y que había participado en una fiesta para celebrar los atentados de EE UU.
Sin embargo, la mujer con la que vivía Jandubi explicó que éste solía llevar mucha ropa, porque "estaba acomplejado con su pequeño trasero". Las investigaciones de la policía siguen adelante.