Andalucía fija una moratoria de un año para la apertura de hipermercados
La Junta de Andalucía anunció ayer que establecerá una moratoria de un año para impedir la apertura de nuevas grandes superficies durante la tramitación de la reforma de la ley andaluza de comercio, que como ya adelantó este periódico supondrá un endurecimiento en la concesión de licencias a instalaciones comerciales de hasta 1.000 metros cuadrados. La moratoria podría entrar en vigor a primeros de año.
Así lo anunció ayer en el Parlamento la consejera de Economía y Hacienda, Magdalena Álvarez, quien explicó que la moratoria afectará también a la ampliación o traslado de establecimientos y centros comerciales que tengan la consideración de grandes superficies (más de 2.500 metros cuadrados según la actual ley).
Según el borrador de la reforma, que como confirmó ayer la consejera está ya "cerrado y consensuado" con todo el sector, la Junta de Andalucía elevará a la categoría de gran superficie incluso a establecimientos de 1.000 metros cuadrados si éstos se ubican en poblaciones de menos de 10.000 habitantes. Para municipios de más de 25.000 habitantes seguirá vigente el actual nivel de 2.500 metros cuadrados. La piedra angular de la reforma, que también regulará nuevas fórmulas comerciales como los parques de fabricantes (factorys) y las tiendas de descuento duro (hard discount), es el cambio en el orden del actual sistema de doble licencia.
Cuando se apruebe el cambio, la Junta otorgará la primera autorización y los ayuntamientos la segunda.
Según cálculos de la patronal andaluza del comercio, en Andalucía existen unos 50 proyectos de complejos comerciales que necesitarían la licencia de la Junta y que pueden verse afectados por la moratoria.
La consejera señaló que esta modificación normativa quiere contribuir a la mejora de la competitividad de pequeñas y medianas empresas comerciales y responde a la conveniencia de adaptar la ley a la "profunda transformación" que ha sufrido el sector desde 1996, cuando se aprobó la actual ley.