Boliden ofrece la mínima indemnización legal a los mineros que despide
Boliden Apirsa ha ofrecido en la primera ronda de negociaciones con los representantes de sus trabajadores una indemnización de 20 días por año trabajado para los 425 mineros de la compañía, sobre los que ha presentado un expediente de extinción de contratos.
Esta oferta constituye el mínimo legalmente establecido en España para este tipo de expedientes colectivos. Las indemnizaciones que ofrece Boliden suman 1.300 millones de pesetas, según los cálcu-los del comité de empresa.
Empresa y trabajadores mantuvieron ayer la primera ronda de negociaciones del expediente de extinción de empleo presentado por la compañía a comienzos de este mes. Los trabajadores no hicieron ninguna contraoferta a Boliden, y se limitaron a señalar que con 20 días por año no se sientan a negociar de nuevo.
Un portavoz de Boliden asegura que los trabajadores han solicitado 45 días por año trabajado como indemnización. Dicho portavoz restó importancia a esa primera oferta, entregada por representantes del despacho de abogados Garrigues, alegando que se trata de la primera ronda dentro de una negociación.
Asistentes al encuentro afirman que Boliden incluso pretende sufragar el expediente de despido comprando algunos de los activos de la mina.
Esta posibilidad fue señalada la pasada semana por el presidente de Boliden Limited, Jan Johansson, en una reunión con representantes de los trabajadores de los yacimientos que la compañía tiene en toda Europa.
El secretario de Comisiones Obreras en Boliden, Luis Campello, afirma que la primera oferta de Boliden es "una tomadura de pelo".
El representante sindical advierte que Boliden tiene que hacer frente a muchos compromisos "sociales, legales y medioambientales".
Guerra psicológica
La negociación ha entrado ahora en una fase que podría calificarse de guerra psicológica. Fuentes presentes en la negociación afirman que Boliden ha llegado a sugerir que la compañía tiene ya un estado financiero que le permitiría instar a la quiebra.
Por el lado contrario, los trabajadores, que se reúnen mañana para adoptar medidas tras la primera ronda negociadora, apelan a la posibilidad de llevar sus reivindicaciones a foros europeos. "Hablaremos con los eurodiputados españoles, con las Administraciones, con la Comisión Europea, podemos meter a Boliden en un laberinto que no le va a gustar", dijo uno de los representantes sindicales.