Volkswagen acuerda con los sindicatos la creación de nuevos empleos
Han sido largas negociaciones, pero han dado fruto. La automovilística alemana Volkswagen y el sindicato IG Metall llegaron ayer, gracias a la mediación del canciller Gerhard Schröder, a un acuerdo para crear un nuevo tipo de contratos más flexibles que permitirá a la compañía aumentar su plantilla en 3.500 personas en su planta principal de Wolfsburg. Con este acuerdo, la empresa podrá montar una nueva furgoneta basada en el modelo Golf y se pueden crear 1.500 puestos más en la planta de Hannóver.
Las conversaciones para crear este tipo de contrato flexible se rompieron en junio pasado al no poder llegar las partes a un compromiso sobre las horas de trabajo, pero la presión de Schröder, quien en el pasado se ha sentado en el consejo de la automovilística germana, ha posibilitado el acuerdo. En éste se contempla que los nuevos empleados trabajarán una media anual de 35 horas semanales (y no las 42,5 propuestas por la empresa inicialmente) y tendrán que llegar a los objetivos de producción y calidad. En caso de que no lo consigan, deberán trabajar horas extras que no serán abonadas.
El salario promedio que percibirá el trabajador se eleva a 5.000 marcos mensuales (2.556,4 euros o 425.359 pesetas) más incentivos. El fabricante de coches también pagará complementos de productividad cuando el proyecto del coche tenga rentabilidad e incluye un plan de distribución de beneficios basado en los resultados de la compañía el año anterior.
Más responsabilidad
El salario y los incentivos trata de equiparar el sueldo de los nuevos trabajadores al de los del resto de la cadena de Wolfsburg. Los nuevos trabajadores deben acudir a cursillos de cualificación semanales durante tres horas. La mitad de ellas serán consideradas como horas de trabajo y la otra mitad no se pagará por la empresa. Según un comunicado de la compañía, con este sistema "los trabajadores tienen más responsabilidad sobre los vehículos producidos y su calidad".
VW comenzará a contratar al nuevo personal a principios de 2002. La empresa calcula que unos 40.000 desempleados de esta zona del norte de Alemania solicitarán el empleo. La posibilidad de extender esta modalidad de contratación a Hannóver está pendiente de que la empresa, presidida por Ferdinand Piëch, se decida a construir un microbús. Decisión que no se espera hasta mediados de septiembre.
Schröder hizo público ayer su satisfacción y urgió al resto de las empresas de su país a tomar ejemplo de lo pactado por VW.