Las cajas alemanas no se alegran de la regulación dictada por Bruselas
El director de la caja alemana Sparkasse Düsseldorf, Ulrich Maurer, mantiene que en su sector no se ha acogido nada bien la decisión de la Comisión Europea de eliminar las garantías existentes hasta ahora en bancos públicos y cajas de ahorros, ya que supone poner trabas al desarrollo de estas entidades financieras.
El mes pasado Alemania se comprometió con Bruselas a renunciar a su sistema de avales que afecta a los 13 bancos públicos y las 550 cajas de ahorros. Maurer, que ha visitado España para sellar un acuerdo de colaboración con la Caja Insular de Canarias, declaró a este periódico que "desde luego no nos alegramos para nada aunque la entendemos porque los bancos alemanes se encuentran detrás de esta medida por cuestiones de competencia". Indicó que los "casos que han existido", en los que ha habido problemas de gestión en algunas entidades financieras, han contado con protección, "como es lógico", porque han estado presentes los poderes públicos "y creo que el cambio que se avecina, con la retirada de esas garantías, no originará problemas".
Apuntó que la desaparición de estos avales "no tendrá efecto sobre nuestros clientes", ya que "la garantía que van a tener a partir de ahora será parecida a la de las cajas españolas a través de un fondo institucional".
La desaparición de estos avales afecta al 40% de las entidades financieras alemanas y, según los analistas y agencias de calificación, provocará un cambio en el sector en el que varios bancos públicos y cajas terminarán en manos privadas.