Giro radical en el fondo de garantía de inversiones
El fondo de garantía de inversiones que Economía se ha comprometido a crear para apaciguar los ánimos de los ahorradores afectados por el caso Gescartera tendrá carácter retroactivo, hasta mayo de 1993, un paso al que Rodrigo Rato se opuso cuando fue aprobada la Ley del Mercado de Valores y que su propio grupo calificó de "fraude político".
Cuando hace tres años 3.500 pequeños inversores, en su mayoría aragoneses, se sintieron estafados por la crisis de la primera agencia de valores citada, Economía anunció la creación del fondo de garantía de inversiones, dormido desde entonces en uno de los artículos de la Ley del Mercado de Valores, pero se opuso a darle carácter retroactivo. Lo consiguió en el Senado, donde el PP tenía mayoría absoluta, pero no en el Congreso, donde sumaron sus fuerzas el PSOE, CiU, PNV e IU.
La actitud del PP queda reflejada en las palabras de su ex portavoz de Economía en la Cámara alta y hoy secretario general de Comercio, Francisco Utrera, quien intervino como ponente de la ley: "Esto es un fraude político", afirmó en referencia a la retroactividad del fondo. "No es la solución y las salidas judiciales se verán entorpecidas; han de ser los responsables de ese fraude (en referencia a los gestores de AVA) los que hagan frente al mismo". Y añadía: "De todos los fondos de garantía de inversiones todavía por crear, uno de ellos, al que se adscriba la operación, va a nacer ya quebrado, con una deuda de 14.000 millones de pesetas".
Este es, aproximadamente, el dinero reconocido que se ha volatilizado en el caso Gescartera, que ha costado el cargo a Enrique Giménez-Reyna.