Los estadounidenses impulsan la economía con más consumo del previsto
Los datos publicados ayer por el Departamento de Comercio de EE UU confirman que los ciudadanos aumentaron su nivel de consumo en mayo por encima de lo previsto por los expertos. Y eso es una buena noticia para la economía, porque el consumo de los particulares representa dos tercios del PIB de EE UU.
Los ciudadanos aumentaron sus gastos un 0,5% en mayo (frente al 0,4% previsto por la mayoría de los expertos), a pesar de que sus ingresos crecieron sólo un 0,2%.
La tasa de ahorro se mantuvo a niveles negativos con un -1,3% (en abril era de -1%), lo que significa que los ciudadanos siguen tomando dinero prestado o vendiendo activos para financiar su consumo.
El dato de consumo seguramente será recibido con alivio por la Reserva Federal, que ha bajado los tipos de interés en seis ocasiones en lo que va de año para impulsar la demanda y el ritmo de crecimiento económico. Los tipos interbancarios han pasado del 6,5% al 3,75%, y los expertos no descartan que vuelvan a bajar en agosto.
Además del consumo privado, los gobernadores del banco central vigilan de cerca la marcha de los beneficios e inversiones empresariales, que por ahora no cesan de bajar.
El sector más afectado por la crisis es el industrial, que representa una quinta parte de la actividad económica del país. Y los datos publicados ayer por la Asociación Nacional de Gestores de Compras (NAPM) indican que la situación en este sector sigue siendo bastante mala, aunque se detectan leves signos de mejora.
El índice de la NAPM subió en junio de 44,7 a 42,1, colocándose al nivel más alto en lo que va de año.
Pero cualquier dato inferior a 50 indica una contracción en el nivel de actividad. Con lo cual el sector industrial sigue oficialmente en recesión y lleva acumulados 11 meses consecutivos de declive.
Según Norbert Ore, presidente del comité que elabora este informe, los datos sugieren que la industria puede recuperarse en la segunda mitad del año, "pero a un ritmo muy lento".
Por otro lado, el Departamento de Comercio anunció también ayer que los gastos en construcción crecieron un 0,3% en mayo, alcanzando un volumen récord de 881.600 millones de dólares.
Aunque la economía sigue creciendo poco (1,2% en el primer trimestre y las previsiones para el segundo apuntan a un 0,6%), el sector de la construcción se está viendo sostenido por el declive en los tipos de interés oficiales y, con ello, de los aplicados a los créditos hipotecarios.