Carrefour se prepara para crecer, olvidándose del 'efecto fusión'
El consejo de administración del grupo de distribución Carrefour propondrá hoy a la junta general de accionistas el pago de un dividendo bruto por acción de 0,41 euros. Esto supone que la filial española destinará un total de 21.506 millones de pesetas (129,25 millones de euros) a este concepto, es decir, un 28% más que lo repartido el ejercicio anterior.
æpermil;sta es la primera junta de accionistas que se celebra después de un ejercicio completo tras la fusión de Pryca y Continente. Durante los últimos meses, Carrefour se ha centrado en consolidar una integración que en un primer momento ha afectado de forma negativa a las ventas de la compañía. De hecho, durante el pasado año la cifra de negocio tan sólo creció un 0,2%, y la previsión es que los ingresos del primer semestre de 2001 todavía se vean afectados por el impacto de la fusión.
La compañía, que tuvo su peor momento en este sentido en octubre de 2000, prevé que las ventas se normalicen a partir de junio de este año y que en el segundo semestre apenas repercuta el efecto de la integración.
En cuanto a los beneficios, Carrefour alcanzó un resultado neto de 54.158 millones de pesetas (325,5 millones de euros), un 63% más que el año anterior, por la venta de 54 galerías comerciales. El beneficio de explotación creció un 18,8% como consecuencia de la optimización de los costes logísticos y de la mejora del margen.
Los directivos de Carrefour también explicarán a los accionistas de la sociedad el plan de inversiones previsto para este ejercicio, que se centrará tanto en la diversificación de actividades como en el crecimiento orgánico.
Plan de crecimiento
La filial española destinará unos 50.000 millones de pesetas (300,5 millones de euros) a la apertura de nuevos establecimientos: cuatro hipermercados, 16 supermercados, 18 ópticas, nueve gasolineras, 24 agencias de seguros y 18 agencias de viajes.
Este plan de aperturas se enmarca dentro de un plan más ambicioso (hasta 2002) que requerirá unos 200.000 millones de pesetas (1.202 millones de euros).
Gran parte de estas inversiones se financiarán con los recursos que la compañía obtenga por las desinversiones que debe realizar como consecuencia de la fusión de Pryca y Continente. La venta de 12 hipermercados, además de varios supermercados y tiendas Dia, podrían suponer para la filial española una inyección de casi 100.000 millones de pesetas (601 millones de euros).
En los últimos días Carrefour ha acordado la venta de cinco hipermercados al gru-po El Corte Inglés y de otros cuatro a Eroski. Los otros tres que quedan pendientes, los ubicados en Alcobendas (Madrid), Algeciras (Cádiz) y San Adrián (Barcelona), están en fase de negociación.
Otra de las apuestas de la filial española del grupo de distribución francés es la potenciación de las marcas propias. Actualmente, Carrefour logra con ellas el 16% de sus ventas, y la idea es que al cierre de este año representen el 20% de la facturación global de la compañía.
Según la empresa, los objetivos para este año son "consolidar la dinámica comercial, finalizar la integración, optimizar los costes, mejorar los canales de comunicación y seguir creciendo".
Desde el punto de vista bursátil, Carrefour ha registrado un crecimiento más o menos sostenido desde principios de año, cuando la acción cotizaba en el entorno de los 11 euros.
El pasado viernes cerró a 15,79 euros, después de haber subido un 2,53%, situándose así ligeramente por encima del nivel de cotización de hace un año.