El Gobierno compensa a Alstom y CAF con 20 trenes regionales AVE
El Gobierno ha adjudicado al grupo francés Alstom y a la española CAF, el consorcio perdedor del contrato de compra de los trenes de alta velocidad para la línea Madrid-Barcelona, un pedido de 20 trenes regionales de alta velocidad, de menores prestaciones que los primeros, por 38.000 millones de pesetas. De este modo, el consorcio franco-español se ve compensado parcialmente por el revés sufrido hace dos meses en el llamado "contrato del siglo", adjudicado a Siemens y Talgo-ADtranz.
El consejo de administración de Renfe, en una nueva sesión de puro trámite donde todo estaba ya decidido, adjudicó ayer a Alstom y CAF el contrato de compra de 20 trenes AVE para trayectos regionales por 38.000 millones de pesetas. Se trata de unidades capaces de circular a 270 kilómetros por hora, más pequeñas que los AVE para largas distancias y con menores niveles de confort.
La resolución del pedido se produce dos meses después de que Renfe, contra pronóstico, dejara a este consorcio fuera del llamado "con-trato del siglo", la compra de 32 trenes de alta velocidad para la línea Madrid-Barcelona, por 123.000 millones de pesetas. Los ganadores de este pedido fueron, a partes iguales, la multinacional alemana Siemens y Talgo-ADtranz.
Tras ese fracaso, Alstom, al igual que los sindicatos representados en la empresa y los partidos de la oposición parlamentaria, argumentaron que la decisión de Renfe había sido política. De hecho, la resolución del concurso, razones técnicas al margen, coincidió con una serie de negociaciones a tres bandas entre España, Francia y Alemania. En ellas ha quedado de manifiesto que las relaciones hispano-francesas atraviesan un momento delicado por los conflictos derivados de las posiciones contrarias a la liberalización del mercado eléctrico, y el desinterés del Gobierno Jospin por extender su red de alta velocidad hasta la frontera española.
En vísperas de esta adjudicación, Siemens ha reconocido que necesita a Alstom y a CAF para poder cumplir los compromisos de fabricación en España de sus 16 trenes de alta velocidad, lo que ha reducido sus opciones de éxito en la licitación de las lanzaderas. La multinacional francesa, por su parte, advirtió hace unos días que el futuro de sus factorías en España y sus casi 2.000 trabajadores dependía de los pedidos que obtuviera en el país.
La propuesta de Alstom-CAF para los regionales ha obtenido una puntuación superior, tanto en la propuesta técnica como en la financiera, dado que el tren ganador tiene un coste de 1.849 millones de pesetas (11,11 millones de euros) por unidad, frente a los 2.200 millones de pesetas (13,22 millones de euros) del que ofrecía Siemens.
En el contrato se impone al ganador la propuesta de los sindicatos UGT y CC OO de Renfe de compartir la carga de trabajo del pedido. En concreto, la compañía ferroviaria se reserva hasta un 20% de la fabricación y el 50% de la conservación, y el mantenimiento integral de los trenes en 14 años.
El resto de la carga de trabajo se la repartirán ambas empresas a partes iguales. Alstom-CAF se comprometen a fabricar en España el pedido íntegro de los trenes. Los centros de producción serán la factoría de Santa Perpetua de Moguda (Barcelona) de Alstom y la de Beasain (Guipúzcoa) de CAF.
Los plazos de entrega se distribuirán en dos bloques. Renfe debe recibir la primera unidad 21 meses después de la firma del contrato y los cinco trenes restantes del primer bloque 28 meses después de la suscripción del pedido. Los restantes se entregarán en 48 meses.
Fomento y Renfe han pospuesto la adjudicación del último contrato, los trenes con cambio de ancho automático, por el que compiten Talgo y Alstom-CAF.
La multinacional francesa desvela su plan industrial el martes
Alstom tiene ya vía libre para dar a conocer el próximo martes su plan estratégico industrial para España a los principales interesados en conocerlo.
Los sindicatos de sus dos factorías, la de Santa Perpetua de Moguda en Barcelona y la de Albuixech en Valencia, han respirado al conocer la noticia de que Renfe y el Ministerio de Fomento adjudican a Alstom y a su socio CAF la construcción de los llamados trenes lanzadera para la línea AVE entre Madrid y Barcelona.
Los trabajadores de estas factorías han vivido días de inquietud desde que el 24 de marzo se conoció que la multinacional francesa había quedado excluida del suministro del pedido principal de los trenes AVE para la nueva línea de alta velocidad. Las fuertes tensiones que se han vivido entre Alstom y Siemens, debido a los contactos que han mantenido para conseguir una colaboración industrial en la construcción del ICE 350, no ha contribuido a tranquilizar a los empleados.
Ahora la adjudicación hecha pública ayer despeja la situación, máxime cuando lleva asegurado con toda probabilidad un pacto para fabricar en las factorías de Alstom los trenes de Siemens, lo que asegura una abundante carga de trabajo.
En este sentido se ha manifestado el presidente del comité de empresa de la fábrica de Santa Perpetua de Moguda, Luis Álvarez, al señalar que la adjudicación asegura la continuidad de la planta. El sindicalista aseguró que si Renfe no hubiera adjudicado a Alstom los trenes de alta velocidad regional "hubiera supuesto el finiquito de la empresa", aunque de todas maneras ha señalado que la auténtica garantía para la continuidad de la factoría es que finalmente la multinacional se decida instalar en Barcelona un centro de I+D.