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Cableuropa logra el control al 100% de sus tres filiales valencianas

Cableuropa, principal accionista de Ono, ha logrado el 100% de sus tres filiales valencianas, gracias a las ampliaciones de capital que por un total de 15.394 millones de pesetas ha llevado a cabo. Los dos socios minoritarios, que exigían 4.000 millones por sus participaciones, se han tenido que ir gratis, al no querer aportar su parte proporcional, que ascendía a 1.075 millones.

Las tres empresas que explotan el negocio por cable de Ono en la Comunidad Valenciana ya son propiedad al 100% de Cableuropa. Eresa y Telecable del Mediterráneo, los dos socios minoritarios, no han suscrito las respectivas ampliaciones de capital aprobadas por las sociedades, previa reducción a cero del capital.

Cableuropa mantuvo el año pasado una larga pugna con estos dos socios para que abandonaran el capital de Valencia de Cable, concesionaria de la red en la capital del Turia; Mediterráneo Norte Sistemas de Cable (MNSC), que explota el cable en la mitad norte de la Comunidad Valenciana, y Mediterráneo Sur Sistemas de Cable (MSSC), que hace lo propio en la mitad sur.

Eresa y Telecable del Mediterráneo se negaron al canje de acciones propuesto por Cableuropa a todos los minoritarios de sus 13 filiales, que tenía como objetivo tomar el 100% de todas ellas antes de la salida a Bolsa. La mayoría aceptó el canje de sus acciones por una participación en Val Telecomunicaciones, que se convirtió en accionista de Cableuropa.

Los dos socios valencianos exigieron acciones de la propia Cableuropa -no de Val Telecomunicaciones- o dinero en metálico y valoraron sus participaciones en 4.000 millones. Eresa y Telecable del Mediterráneo amenazaron incluso con entorpecer la salida a Bolsa de Cableuropa con acciones judiciales.

El pasado mes de octubre, en vísperas de la frustrada salida a Bolsa de compañía, se llegó a un acuerdo por el que Val Telecomunicaciones compraría estas participaciones minoritarias por 4.000 millones y luego las canjearía por acciones de Cableuropa. El acuerdo se haría efectivo en el momento en que Cableuropa empezase a cotizar en Bolsa, cosa que finalmente no ocurrió por renuncia de la compañía.

La toma del 100% seis meses después le ha salido a Cableuropa mucho más barata. Las tres filiales aprobaron a finales de diciembre realizar operaciones acordeón -reducir el capital a cero y volver a ampliarlo- para absorber las pérdidas.

Eresa y Telecable Mediterráneo han renunciado a suscribir la ampliación, ya que debían desembolsar para mantener su participación 1.075 millones de pesetas.

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