Campo de las Naciones creará un nuevo centro ferial y de congresos
La Empresa Municipal Campo de las Naciones, propiedad del Ayuntamiento de Madrid, se ha hecho cargo de las instalaciones de la Casa de Campo para crear un nuevo centro ferial y de congresos que competirá tanto con Ifema como con el propio Palacio de Congresos que gestiona Campo de las Naciones. El primer paso es sacar a concurso varios edificios de la antigua feria de muestras para convertirlos en restaurantes. También se remodelará el Palacio de Cristal y el edificio de la Pipa y se cubrirá el rockódromo para luego unir los tres.
Los edificios de La Masía, Valencia, Cáceres, Asturias y El arroz valenciano, los cinco ubicados en la antigua Feria de Muestras de la Casa de Campo de Madrid, saldrán a concurso público el próximo día 27 de abril con el fin de convertirlos en restaurantes especializados. Actualmente, sólo hay tres restaurantes operativos (La Casiña, Currito y Guipúzcoa). æpermil;ste será el primer paso del plan especial que la Empresa Municipal Campo de las Naciones dará para convertir las instalaciones de la Casa de Campo en un nuevo centro de ferias y congresos.
Según Jorge Barbadillo, consejero delegado de la Empresa Municipal Campo de las Naciones, la idea es "concentrar y homogeneizar la oferta de congresos, reuniones y ferias" que gestiona la sociedad. Con esta iniciativa, la compañía municipal competirá con Ifema, aunque, según Barbadillo, "en Madrid hay capacidad para que funcionen cuatro centros de congresos".
Los edificios destinados a restaurantes serán concesiones administrativas con periodos de duración de entre 12 y 14 años, en función de las inversiones que sean necesarias realizar. Si esta iniciativa tiene éxito, la empresa sacará el año que viene a concurso otros inmuebles de la antigua Feria de Muestras que, previamente, tendrá que reconstruir.
Además de la zona de restauración, la segunda prioridad es el área ferial donde se generará una zona verde, se construirán nuevos aparcamientos y se remodelará el Palacio de Cristal y el de la Pipa con el fin de modernizar sus instalaciones. También está previsto cubrir el rockódromo que está anexo y convertirlo en un pabellón polivalente en el que se puedan organizar grandes conciertos, ferias o congresos.
Una vez que los tres edificios estén acondicionados, se conectarán entre sí. Todo ello se completará con el cierre del perímetro y con nuevos sistemas se vigilancia.
La inversión estimada para este proyecto es de unos 2.500 millones de pesetas. De momento, se está elaborando un libro blanco para perfilar las necesidades y posibilidades de cada área, y luego se organizará un concurso de ideas.
La intención es que todo esté en marcha antes de dos años (cuando acaba la legislatura municipal), aunque el plan contempla también la adaptación del resto del espacio con una zona infantil, otra verde que incluye el lago y un área administrativa.