Sindicatos y patronal se dan un día más antes de que legisle el Gobierno
Las negociaciones para conseguir un pacto de reforma laboral agonizarán un día más. Anoche se terminó el plazo que se impusieron las partes, pero hoy seguirán los contactos. Si no hay un acuerdo a lo largo de la jornada, el Gobierno llevará las "medidas" de reforma al Consejo de Ministros de mañana viernes.
La de ayer fue una noche de "teléfonos cruzados y despachos abiertos", según la definió el interlocutor de la patronal en la negociación de la reforma laboral, Juan Jiménez Aguilar.
Ayer, a las 12 de la noche, terminó el plazo que se dieron los propios agentes sociales para llegar a un acuerdo, pero los representantes de la CEOE y de los sindicatos mantuvieron un largo encuentro contrarreloj en el que acordaron darse un día más (hasta hoy por la tarde) para agotar al máximo las posibilidades de consenso.
Este encuentro, que fue un intento desesperado por evitar que sea el Gobierno el que imponga su reforma, tuvo que interrumpirse para que Jiménez Aguilar acudiera a una reunión tripartita de la otra mesa de diálogo social, la de las pensiones. A su término, los teléfonos siguieron funcionando y lo harán durante todo el día de hoy.
No obstante, a última hora de ayer, el interlocutor de la patronal era más pesimista que los sindicatos y descartaba que las partes fueran a pedir otra prórroga para seguir intentado el consenso, punto éste, el de la prórroga, que no era del todo rechazado por los sindicatos.
"No es cuestión de plazos, sino de voluntades. O el acuerdo se cierra ya (por hoy) o no habrá acuerdo", dijo Jiménez Aguilar. Dicho esto, añadió en tono pesimista que "las dificultades siguen siendo importantes, y las diferencias, grandes".
Por el contrario, las centrales sindicales matizaron y barajaron la posibilidad de ampliar el plazo del diálogo con tal de que el Gobierno no legisle unilateralmente. Así, manifestaron que "el tiempo de la negociación pertenece a los propios negociadores, y las organizaciones sindicales planteamos la necesidad de continuar discutiendo, porque las medidas eficaces sólo nacen del acuerdo".
La incógnita sobre si la negociación se alargará aún más la despejaron ayer dos miembros del Gobierno, el titular de Economía, Rodrigo Rato, y el de Trabajo, Juan Carlos Aparicio. Ambos dieron a los agentes sociales un solo día, hoy, para cerrar un pacto; si no, legislarán.
Aparicio fue el más contundente: "El Gobierno llevaría medidas al próximo Consejo de Ministros si no se cumple el plazo". El contenido de esta reforma se basará en las peticiones de los agentes sociales y estará orientada a limitar el abuso de la temporalidad, hacer más atractivos los contratos fijos y mejorar el tiempo parcial.