Las familias redujeron en 2000 su inversión en fondos y acciones
El pésimo año que vivieron las Bolsas en 2000 se ha dejado notar en la preferencia inversora de las familias españolas. La inversión en depósitos superó a la destinada a fondos y a inversión directa en Bolsa, que, no obstante, acaparan juntas un 46% del ahorro de las familias.
La bonanza bursátil que arrojó 1999 permitió que por primera vez los ahorradores destinaran más dinero a la inversión directa en Bolsa y activos de renta fija que a depósitos. Así como cambió el sesgo del mercado en 2000, también lo hizo el destino del ahorro de las familias españolas durante el pasado ejercicio. Los pequeños ahorradores volvieron a buscar refugio en instrumentos conservadores, huyendo del varapalo de los mercados de valores.
Según los datos de Inverco, la patronal del sector de fondos de inversión y planes de pensiones, las familias españolas destinaron en 2000 un 36,4% de sus ahorros a depósitos remunerados; una cifra que en dinero contante y sonante alcanza los 70 billones de pesetas. Por el contrario, la inversión directa en Bolsa y activos de renta fija fue de 63,9 billones de pesetas, un 33,3% del total y ocho billones de pesetas menor a la registrada en 1999. Concretamente, la inversión en Bolsa durante el pasado ejercicio fue seis billones menor a la registrada durante el suculento ejercicio 1999.
Los fondos de inversión también sufrieron parte del rechazo de los ahorradores, los cuales tenían a finales del año pasado 28,6 billones de pesetas invertidos en productos de inversión colectiva, equivalente a un 14,9% de la cartera de ahorro de las familias españolas. En 1999, la proporción invertida en fondos de inversión era del 16,5%.
Según Félix López, presidente de la Agrupación de Fondos de Inversión, integrada en Inverco, dos tercios del ahorro de las familias se destina todavía a la compra de una vivienda, aunque, matizó ayer, el inversor se ha sofisticado mucho y destina cada vez más a la renta variable y a los mercados internacionales. "Más que un año negativo, el pasado fue un año de transición, porque frente a la caída de la Bolsa subyace un cambio de tendencia desde los fondos más conservadores hacia los de renta variable.
Los representantes de Inverco se mostraron ayer optimistas con las perspectivas del sector de fondos para 2001 debido a las todavía satisfactorias previsiones económicas y a la rebaja de los tipos de interés, que impulsará los mercados.
La asociación estima que los fondos de inversión aumentarán su patrimonio un 7% este año, hasta los 32,5 billones de pesetas, y que el patrimonio del conjunto de las instituciones de inversión colectiva lo hará un 10%, hasta los 38,2 billones de pesetas. Según explicó Félix López, en el plazo de unos seis o siete años el patrimonio de estas instituciones podría alcanzar los 70 billones de pesetas.