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Continúan las labores de control de la polución en las islas Galápagos

Las labores de vigilancia continúan en las islas ecuatorianas de Galápagos, 20 días después de que el buque Joseba derramara 600.000 litros de combustible tras encallarse frente a las costas de San Cristóbal. El director del Parque Nacional Galápagos, Eliécer Cruz, aseguró que "la emergencia no ha terminado, ya que las corrientes son muy caprichosas".

Los expertos no se imaginaron que el combustible iba a llegar a Floreana, sin embargo, las manchas provocaron problemas en la isla Isabela. Por esta razón, creen ahora "necesario seguir chequeando la zona", advierte Cruz. En total, se han encontrado seis animales muertos y una mancha que ha afectado, hasta ahora en diferentes grados, a las islas Santa Cruz, Isabela, Floreana, Santa Fe, San Cristóbal y a pequeños islotes. Cruz añadió que tras una inspección submarina del buque se ha determinado que los tanques de la nave tienen agujeros y no queda carburante, por lo que se ha pedido a los dueños de la embarcación que la saquen del lugar. Hasta ahora sólo el capitán del buque, Tarquino Arévalo, ha reconocido su responsabilidad al aceptar un error humano tras confundir un faro con una boya.

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