El número dos de Fomento prueba el tren AVE de Talgo

El secretario de Estado de Infraestructuras, Benigno Blanco, asistió oficialmente el pasado 22 de diciembre a las pruebas que desarrolla Talgo con su prototipo de alta velocidad en la línea Madrid-Sevilla. Talgo es una de las tres empresas que compite por los trenes AVE para el Madrid-Barcelona. Este concurso está en pleno periodo de evaluación de ofertas por el propio ministerio y Renfe. La visita ha causado un profundo malestar en otras empresas que compiten por el pedido y dentro de Renfe.

Benigno Blanco, el secretario de Estado de Infraestructuras, el segundo cargo en importancia del Ministerio de Fomento después del propio ministro, Francisco Álvarez Cascos, ha asistido oficialmente a las pruebas que desarrolla Talgo con su prototipo de alta velocidad en un tramo de la línea Madrid-Sevilla. La visita del secretario de Estado se produjo el pasado 22 de diciembre y, durante la misma, el comboy, que realizó las pruebas en la zona entre Mora y La Sagra, llegó a alcanzar en una parte del trayecto los 340 kilómetros por hora.

La iniciativa de Blanco, que no ha visitado hasta ahora los otros dos trenes que están en la puja, el de Alstom-CAF y el de Siemens, se ha producido cuando entra en la recta final el proceso de evaluación de sus ofertas para hacerse con el llamado contrato del siglo, con un presupuesto máximo de 110.000 millones de pesetas. El propio ministerio y Renfe acaban de constituir una comisión para estudiar y evaluar las ofertas.

Esta comisión la integran dos miembros de la Secretaría de Estado de Infraestructuras y otros dos del operador ferroviario público.

La visita de Blanco ha causado un profundo malestar tanto en otras empresas del sector como entre cuadros directivos de Renfe, según ha podido saber este periódico de fuentes solventes.

Unos y otros consideran la iniciativa del alto cargo improcedente, discriminatoria y poco ética. Fuentes oficiales de Alstom consultadas declinaron hacer declaraciones, mientras Siemens afirma que considera positivo que el cliente realice visitas para comparar los productos que están en la puja.

El propio Benigno Blanco confirmó a este periódico a través de una portavoz la visita a las pruebas, y afirmó textualmente: "El secretario de Estado de España ha presenciado una prueba de alta velocidad de una empresa española, sobre una red ferroviaria española, dependiente de una Secretaría de Estado de España, ¿hay algún problema?". Talgo ha declinado hacer comentarios y remite al Ministerio de Fomento.

Las fuentes citadas en primer lugar consideran especialmente inoportuna la visita del secretario de Estado a las pruebas de Talgo por su anterior relación profesional con Iberdrola, una empresa controlada por la familia Oriol, al igual que la propia Patentes Talgo. Benigno Blanco ha sido director de los servicios jurídicos de Iberdrola y secretario del consejo de administración de la compañía eléctrica.

Además, ha sido miembro del comité jurídico de Unidad Eléctrica de España, la patronal del sector, miembro del comité consultivo de la Comisión Nacional del Mercado de Valores. La pasada legislatura ocupó la Secretaría de Estado de Aguas y Costas en el Ministerio de Medio Ambiente, con Isabel Tocino.

A la prueba del 22 de diciembre también asistió el presidente de Renfe, Miguel Corsini. Fuentes oficiales de la empresa afirman que el presidente ha visitado, dentro de los trabajos para elegir el suministrador o suministradores de los trenes, los productos de los tres contendientes. La pasada semana, el presidente de la compañía ferroviaria volvió a acudir a una prueba del prototipo de alta velocidad de Talgo, que intentaba alcanzar los 360 kilómetros por hora. El tren llegó a circular a 355 kilómetros.

El concurso de adquisición de los trenes de alta velocidad se abrió en marzo, cuando el consejo de Renfe aprobó el pliego de condiciones para calificarse en la puja. Las ofertas definitivas se presentaron a finales del pasado mes de septiembre.

 

Renfe abre negociaciones bilaterales con los aspirantes

Renfe ha iniciado las reuniones bilaterales con los tres aspirantes que quieren suministrar los trenes de alta velocidad para la línea Madrid-Barcelona Frontera Francesa. Tras analizar en detalle las propuestas presentadas, ahora los técnicos de la empresa han empezado a reclamar detalles técnicos de sus productos y de sus propuestas financieras, según fuentes solventes del sector.

Dentro de la empresa que preside Miguel Corsini, se barajan como fechas probables para adjudicar el contrato principal el consejo de administración que se celebrará el próximo 25 de marzo o, a más tardar, el siguiente mes de abril.

Previamente se ha constituido una comisión de evaluación conjunta entre el Ministerio de Fomento y la propia Renfe, ya que el departamento que dirige Francisco Álvarez Cascos quiere controlar muy estrechamente el proceso de adjudicación.

La intención de Renfe es separar la adjudicación de los llamados trenes AVE regionales, con velocidades máximas de 270 kilómetros por hora, menores niveles de confort y destinados a trayectos intermedios en ancho internacional, del gran pedido de trenes de altas prestaciones que deben realizar el trayecto Madrid-Barcelona en dos horas y media. Las fechas barajadas para resolver este pedido, que implica la compra seis unidades con opción por 24 más, son febrero o junio.

A su vez, el tercer concurso de compra de material rodante en marcha, la adquisición de trenes dotados con cambio automático de ancho de ejes en todo el tren, por el que pujan Talgo, con su modelo Talgo XXI y Alstom- CAF, empresa que ha desarrollado un nuevo bogie denominado Brava, se quiere resolver junto al contrato principal.

Renfe ha elaborado unos pliegos de condiciones muy abiertos, especialmente en el caso del contrato de los trenes de muy altas prestaciones. La compañía ferroviaria puede repartir la adjudicación, que se refiere a un pedido de entre 26 y 40 trenes, entre dos o más empresas.

Esta prerrogativa puede ser clave para dilucidar los tres concursos simultáneos de compra de material.

La empresa que preside Miguel Corsini maneja desde hace tiempo estudios técnicos internos que afirman que el Talgo es el tren con menor valor añadido español de su actual parque, según las mismas fuentes, debido a que buena parte de los materiales con que se fabrica son importados. Además, al carecer de tracción propia, sus trenes son traccionados por locomotoras de otro fabricante, normalmente empresas alemanas.

Al concurso de la alta velocidad, sin embargo, Talgo presenta su nuevo modelo 350. La cabeza tractora ha sido encargada a la todavía alemana ADtranz, pero Talgo ha comprado también la patente de ese desarrollo específico. El producto está en fase de pruebas y homologación por Renfe desde antes del verano.

Las dos cabezas tractoras diésel del prototipo del Talgo XXI han sido desarrolladas por la citada ADtranz, encargada de la fabricación de los motores, que son de patente alemana, y la también germana Krauss Maffei, filial del grupo Siemens, que ha desarrollado en colaboración con Talgo el bogie de la locomotora capaz de cambiar de ancho de vía.